lUIS Del Olmo no presentará en la nueva temporada su programa Protagonistas, que pasará a engrosar el limbo de los justos de los programas que han sido referenciales en el devenir de la historia reciente de la radio. Tras 11.000 diarias citas con los oyentes, el bravo leonés abandona la trinchera del día a día y se refugia en un rinconcito y anuncia entrevistas de postín. Ya lo hizo Iñaki Gabilondo y ahora le toca el turno a Del Olmo, que se quitará el mono de asomarse a los micrófonos con estas pequeñas dosis de micro. Se retira uno de los santones de la radio española del último medio siglo y es y ha sido un prototípico hombre del medio que ha tenido auténtica obsesión por mantener la cita diaria con los oyentes, pasando por varias empresas y siendo concesionario de un puñado de frecuencias en Catalunya. Profesional que inició su andadura en la radio franquista se sumó con la democracia a la tarea de defender los nuevos valores desde una personalidad asentada y firme en la defensa de sus tesis y posiciones. Impresionante catarata sonora, Luis del Olmo ha sido otro de los personajes del star system de los grandes magacines. Conductor de un programa emblemático de la oferta, ha sufrido vaivenes de audiencia a su paso por varias empresas y la experiencia en la actual cadena no ha sido muy satisfactoria para un profesional que ha manejado miles de seguidores en su trayectoria. Su pasión por la radio le ha llevado a montar un museo sobre el medio en su natal Ponferrada y el estilo dúctil y firme de este presentador de magacín desaparecerá paulatinamente del panorama en un ejercicio de relevo generacional que se impone. Respeto al oyente, motivación activa con los colaboradores, pasión por la palabra dicha son algunos rasgos que definen el quehacer de un personaje que soñaba con morir con las botas puestas en el locutorio de turno.
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