En una carta escrita a la dirección el 5 de septiembre por un tal Javier Orcajada del Castillo se dicen tantas tonterías , falsedades, y mentiras, que me veo obligado a contestar.El nefasto Trump ganó las elecciones de 2016 porque Hillary Clinton era aún más nefasta, si es posible, para los que votaron. Clinton insultó a la clase obrera blanca que votó en su mayoría por Obama, llamándoles “deplorables” y tampoco hizo campaña en Michigan y Wisconsin. Y hubo una gran abstención.El Sr. Orcajada tampoco sabe mucha historia. Truman no fue elegido como presidente en 1944, sino como vice-presidente. No es la misma cosa. Los poderes fácticos tramaron para reemplazar al vice-presidente progresista Henry Wallace con el ignorante pero complaciente Harry Truman. Truman se hizo presidente al morir Roosevelt. Estoy seguro de que Henry Wallace no habría autorizado el terrible uso de la bomba atómica contra Japón, el país que mató a 300.000 chinos en Nanking con bayonetas en el curso de seis semanas.La política de enviar a la gente poco deseable a la América Británica sí que tuvo impacto sobre la expansión de la población blanca pero no fue el factor más importante para la colonialización del país como lo fue en el caso de Australia.La pobreza de los EEUU sí que está aumentando y esto desde los años 80 con la ayuda de ambos partidos, que son dos alas derechistas del mismo partido, como decía Gore Vidal. Los gastos para mantener el imperio norteamericano están subiendo y la financialización de la economía, junto con el envío de buenos puestos de trabajo a China y otros países han hundido el 99% del país. Ni el payaso naranjo Trump ni el zombi Biden, que tiene historial de racista, ofrecen soluciones al declive de EEUU y el empobrecimiento de su gente. China va a reemplazar a los Estados Unidos como el país de referencia en el mundo dentro de dos décadas o antes. Sin embargo, Sr. Orcajada del Castillo, no todos los gringos son iguales. Mi propio hermano es muy, pero muy, muy anti-Trump pero a mis primos en Oklahoma les encanta. Hay de todo en EEUU. Por lo tanto, no es de recibo insultar a toda la gente de un país como lo hace el Sr. Orcajada del Castillo. Si yo dijera que todos los españoles son unos fachas fanáticos y toreros tontos con sueños de restaurar la Santa Inquisición o que todos los vascos son criptoetarras y racistas con metralletas debajo de sus camas, se ofendería mucha gente... y con razón. Euskal Herria nire aberria da baina Estatu Batuak nire sorterria. Entiendo los dos países muy bien, a diferencia del Sr. Orcajada del Castillo.