hoy, martes, 13 de octubre, se cumple un año desde que se dejaron de depositar residuos urbanos en el vertedero de San Marcos tras casi 40 años en activo.

El vertedero de San Marcos, con la consecución del "vertido cero", sigue por fin los pasos de los vertederos ya clausurados de San Blas (Tolosaldea), Ventas (Txingudi) y de la incineradora de Akei (Debagoiena), que además prestaba servicio a la Mancomunidad de Debabarrena.

Aún son tres los vertederos que permanecen activos en Gipuzkoa, Sasieta (Beasain), Urteta (Zarautz) y Lapatx (Azpeitia) que, junto con el vizcaino de Igorre reciben todos los residuos urbanos que generamos los guipuzcoanos. La aprobación, en la última asamblea del Consorcio celebrada la pasada semana, del proyecto del Centro de Gestión de Residuos de Gipuzkoa, en Zubieta, marca un antes y un después. Tras una denodada labor y a la espera, en breve, del acuerdo urbanístico con el Ayuntamiento de Donostia y de la consecución de la Autorización Ambiental Integrada, el cierre de todos los vertederos del territorio inicia definitivamente su cuenta atrás. La era de los vertederos toca a su fin.

Un año después del hito que constituyó el "cierre" del vertedero de San Marcos, quisiera recordar y reafirmar los compromisos asumidos por esta Diputación Foral.

Después de diversos tiras y aflojas que retrasaron en casi diez meses la fecha inicialmente prevista, hace un año, se consiguió que cesaran los vertidos en San Marcos. Un año después, creo sinceramente, y así me lo confirman vecinos del entorno, que los olores y molestias para los vecinos de la zona se han reducido sensiblemente. El esfuerzo mereció la pena. No obstante, aún queda mucho por hacer.

Este vertedero debe ser sellado y clausurado definitivamente. En la zona deberá acometerse una importante labor de recuperación. Viene bien recordar que mediante el acuerdo que permitía derivar a otros vertederos los residuos de San Marcos, la mancomunidad se comprometió a adjudicar a la mayor brevedad la redacción del proyecto de sellado del vertedero y de recuperación del entorno. El cierre y el sellado del vertedero eran, y siguen siendo, competencia de la Mancomunidad de San Marcos.

Aún así, el cuidado y mantenimiento de toda la zona deberá continuar durante los próximos 30 años, mínimo. ¿Alguien a estas alturas piensa que el vertedero es la mejor alternativa para el cierre del proceso de gestión de las basuras que generamos? La fracción resto, aquella que no ha podido ser reutilizada, reciclada o compostada, no desaparece: o se deposita en vertedero o se incinera transformándola en energía. "La materia ni se crea ni se destruye, se transforma" (Antoine Lavoisier).

La Diputación Foral de Gipuzkoa tiene claro el camino a seguir en materia de gestión de residuos. Vamos a seguir trabajando conjuntamente con todas las mancomunidades del territorio, desde el Consorcio de Residuos de Gipuzkoa, para construir las infraestructuras necesarias ya definidas, para conseguir un modelo de gestión de residuos integral y sostenible. Será puntero a nivel europeo. La aprobación en las Juntas Generales de Gipuzkoa con amplia mayoría de la Norma Foral de Residuos y de los acuerdos alcanzados en el seno del Consorcio, auténtico parlamento territorial en el tema de los residuos, dan fe de ello.

En este mismo objetivo , quiero reiterar tres compromisos de la Diputación. En primer lugar, seguiremos las directrices establecidas desde la UE para conseguir que nuestro sistema de gestión de residuos sea modélico. Continuaremos impulsando la prevención y apostando por el reciclaje y el compostaje. Valorizaremos energéticamente mediante incineración los residuos que no hayamos podido prevenir, reciclar ni compostar. De acuerdo con lo establecido en las disposiciones europeas aprovecharemos su energía, y no la despilfarraremos en vertederos como está ocurriendo a día de hoy.

En segundo lugar, el cese de vertido en San Marcos no es más que el primer paso en la solución integral del tema de los residuos. Vamos a apoyar al máximo la construcción del Centro de Gestión de Residuos de Zubieta, que nos permitirá cerrar definitivamente los vertederos de Gipuzkoa. Lapatx, Urteta y Sasieta están realizando un importante esfuerzo de solidaridad y su capacidad y vida útil está concluyendo. Sin el leal compromiso y solidaridad de sus gestores, difícilmente a día de hoy podríamos estar celebrando el primer aniversario del vertido cero en San Marcos.

Y en tercer lugar, mantendremos la intensa colaboración de trabajo con las mancomunidades y los ayuntamientos apoyándoles mediante subvenciones directas las actuaciones de prevención que promuevan. Financiaremos la construcción de garbigunes en todas las mancomunidades para impulsar la recogida selectiva y el reciclaje y apoyaremos también el compostaje doméstico mediante el reparto gratuito de autocompostadores (ya hemos puesto a disposición de las mancomunidades en torno a 8.000 unidades) y el impulso de la red de compostadores de Gipuzkoa, recientemente creada por la institución foral.

La Diputación Foral de Gipuzkoa está realizando una apuesta honesta y decidida por construir un nuevo sistema de gestión integral de nuestros residuos. Una apuesta que partiendo de la planificación aprobada (Norma Foral de Residuos y Plan Territorial Sectorial de infraestructuras de residuos) está encaminada a la consecución de unos objetivos muy ambiciosos en materia de gestión de residuos. Una apuesta de calado.

En definitiva, seguiremos trabajando por conseguir una gestión de residuos lo más sostenible posible, mediante la búsqueda de consensos y de acuerdos interinstitucionales. Por nosotros que no sea. Las futuras generaciones nos lo agradecerán.