Una de las plataformas que se utilizan para realizar estas emisiones en directo es Twitch, propiedad de la empresa Amazon. Además de ver de forma gratuita las emisiones, los usuarios pueden suscribirse mensualmente a los canales de sus streamers favoritos pagando una cuota que puede variar entre 5 y 25 dólares mensuales (de 4,5€ a 22,5€ euros, más o menos). Es una forma de apoyar el trabajo que hacen, para que puedan seguir realizándolo. Si nos suscribimos a un canal, podremos ver las emisiones evitando la publicidad, recibiremos un emblema digital de suscriptor que irá cambiando con el tiempo, ganaremos emoticonos personalizados que podremos usar en los chats, y podremos acceder al chat para suscriptores cuando los streamers decidan activarlo si hay mucho barullo en el chat general. De esta cuota que los usuarios pagamos Twitch se queda el 50%, y el resto lo gana la persona que está emitiendo en directo.

Muchos adolescentes y adultos jóvenes creen que se gana mucho siendo streamer. Ven a sus ídolos, los más famosos, y quieren ser como ellos. Según twitchtracker.com solamente en mayo de 2022 había 1.190.805 streamers en activo a diario en el mundo, llegando a haber siete millones de streamers en activo de forma global. En contra de la creencia general, los streamers generalmente no ganan mucho dinero. Una investigación de The Wall Street Journal reveló el año pasado que el 95% de los streamers ganan 100 dólares al año, el 5% gana 1.000 al año, y solamente el 1% gana más de 1.000 dólares al año. Dentro de este 1% está el grupo muy pequeñito de streamers que gana mucho, mucho dinero.

Imagen de una suscripción.

Imagen de una suscripción.

Además, o independientemente de las suscripciones, los usuarios pueden hacer donaciones puntuales a sus streamers favoritos para mostrarles su cariño y apoyo. Esto se puede hacer a través de los bits, una especie de moneda virtual de Twitch. Estas donaciones se pueden realizar en cualquier momento de la retransmisión y se hacen de forma pública. Al hacerlo, el streamer suele agradecer en directo a la persona que haya enviado los bits. Estos son los precios aproximados de los bits: 100 cuestan 1,53 euros, 300 cuestan 3,28 euros, 500 bits cuestan 7,65 euros, 1.500 bits salen por 21,81 euros, 5.000 por 70,42 euros, 10.000 bits cuestan 137,78 euros, y 25.000, 336,79 euros.

Esta actividad de las donaciones en directo está generando situaciones y escenarios extraños, y en algunos casos se está comenzando a dar de forma masiva. Algunas veces, se hacen para llamar la atención de los streamers, ya que al hacerse de forma pública el streamer agradece en directo a la persona que lo ha enviado y todo el mundo puede verlo. Ese reconocimiento genera una sensación de bienestar en muchos adolescentes, que de alguna forma suple momentáneamente problemas de atención emocional que puedan tener, da un subidón momentáneo de autoestima al recibir el agradecimiento personalizado de sus ídolos en público delante de miles de espectadores… y entre otras cosas provoca que muchos adolescentes comiencen a realizar donaciones de forma continuada, aunque se gasten toda la asignación semanal que les proporcionan sus familias o sean adultos jóvenes con apenas ingresos. Otras veces las donaciones se convierten en una competición para ver quién puede dar más en directo. 

Se empiezan a ver situaciones en las que los streamers que más dinero ganan son los que más donaciones reciben por parte de seguidores que no tienen ingresos. Entre los grandes streamers con más sentido común se está abriendo un debate sobre las consecuencias de esta situación y cómo les está haciendo sentir. Hay algunos que pueden ganar 10.000€ dólares al mes o más, y están viendo cómo seguidores con pocos recursos les llegan a mandar entre 50€ o 100€ en bits a través de pequeñas donaciones y se preocupan por ellos, incluso llegando a pedirles que no donen más. Además, esas donaciones son ínfimas comparadas con las cantidades que ganan gracias a los suscriptores o a la publicidad.

Estos streamers sensatos, que los hay a pesar de la mala reputación que muchos tienen por el comportamiento de unos pocos, están recordando constantemente que ya ganan mucho dinero, y que se les puede apoyar y mostrar cariño de muchas formas sin gastarse el dinero, por ejemplo compartiendo su contenido en las redes sociales, haciendo comentarios positivos, suscribiéndose de forma gratuita a sus canales y cuentas en otras redes sociales o viendo sus retransmisiones.