- Todos hemos visto reportajes de japoneses que han aprendido euskera, pero también hay vascos que han aprendido japonés. Por ejemplo, la urretxuarra Maite Aguado. Ama aquel país y su cultura y ha estado allí en dos ocasiones. Está esperando que la situación se normalice para ir allí a vivir.

Aguado admira la cultura japonesa desde niña. "Mi primer contacto con Japón fue a través del anime (dibujos animados), pero no soy demasiado otaku (friki). Me gustaban los dibujos animados japoneses que emitían en ETB (Doraemon, Dragoi Bola...) y he solido ir a ferias de manga (cómic japonés), pero lo tengo bastante dejado. La música japonesa también me gusta mucho y el cineclub de Urretxu y Zumarraga me ha dado la oportunidad de disfrutar del cine japonés".

Tenía solo quince años cuando viajó por primera vez al país del sol naciente. Fue entonces cuando se enamoró definitivamente de Japón y su cultura. "La hermana de mi tía Trini, María, vivía en Japón. Mi hermana y yo fuimos a visitarle y nos enseñó el país. Todo me pareció interesante: la cultura, el arte, la gente, el idioma...".

Es más, le pareció el país perfecto. "Cuando algo te gusta mucho, tiendes a idealizarlo. Me pareció el país perfecto: el respeto, el protocolo, el sentimiento de comunidad, lo hospitalarios que son con los extranjeros... Pero según vas conociendo a la gente y la cultura te das cuenta de que no es un país tan perfecto. De todos modos, cuando amas algo, aceptas sus defectos. Es un país muy atractivo. Es un país de contrastes: tienen un modo de vida occidental, pero al mismo tiempo son muy distintos a nosotros".

Esa pasión le llevo a estudiar japonés. "Estoy en la clase de nivel B2, pero creo que mi nivel real es el B1. En clase estudiamos gramática, vocabulario... Pero lo más difícil es hablar. Cuando estuve trabajando en Barcelona (estudió Historia y trabajó en museos y centros culturales) quedaba con japoneses para hablar japonés. También practicaba con los turistas".

En 2019, visitó Japón por segunda vez. Para entonces, se defendía bastante bien en japonés. Tiene intención de volver al país asiático. "Solicité un visado Working Holidays (vacaciones trabajando) y me lo concedieron. No he podido ir todavía, a causa de la pandemia. Espero hacerlo pronto. Con ese visado puedo pasar un año en Japón. El objetivo es trabajar allí y practicar el idioma. Después, si consigo que una empresa me haga un visado de trabajo, me quedaré más tiempo". comenta.

Anima a los vascos a conocer Japón. Y a ver las películas japonesas, que es una manera fácil y barata de conocer aquel país. "En Netflix hay cosas muy frikis, pero el cine de Hirokazu Koreeda y Naomi Kawase está muy bien. Por otro lado, es verdad que el euskera y el japonés tienen ciertas similitudes. Siempre colocan el verbo al final de la oración y el sujeto al comienzo. Además, muchas palabras tienen cierto parecido", comenta la urretxuarra.

Ella empezó a estudiar japonés en sus tiempos de universitaria. "En aquellos tiempos no había demasiadas opciones y lo dejé. Retomé los estudios de japonés en 2014, cuando fui a Barcelona", recuerda Aguado.

Añade que cada vez hay más interés por Japón. "En el propio pueblo, conozco gente que está interesada en la cultura japonesa", concluye.

La urretxuarra Maite Aguado tenía solo quince años cuando visitó Japón por primera vez y le pareció que era el país perfecto