- En mayo de 2023 Donostia tendrá un Museo de la Tamborrada, según los planes que impulsa un grupo compuesto por una quincena de formaciones, tanto de adultos como infantiles, que ha conseguido el visto bueno inicial del Ayuntamiento a su propuesta, según explican.

Aunque el asunto lleva tiempo rondando las cabezas de muchos participantes en la fiesta, en estos últimos meses ha empezado a tomar forma y se ha creado el Patronato del Museo Histórico de la Tamborrada, que ha presentado su iniciativa al Consistorio. Este nuevo colectivo se reunirá en los jardines de Aiete el domingo 12 para grabar un audiovisual sobre la fiesta, con presencia de asociaciones de recreación histórica, que son habituales en la celebración del 31 de Agosto, como Urgull Histórico, Blas de Lezo, Anaka y Asociación del 31 Agosto, entre otras.

Por el momento, quedan aún muchos flecos por cerrar pero la idea es que el Museo de la Tamborrada pueda ubicarse en un lugar representativo, como podría ser el Palacio de Miramar, el Palacio de Aiete o el edificio histórico de la casa de cultura de Okendo.

El espacio expositivo no solo serviría para mostrar antiguos trajes, actas históricas de la fiesta, utensilios como barriles y tambores o imágenes de celebraciones del pasado, también pretende ser un espacio de gestión de las propias tamborradas.

Según explican sus impulsores, el lugar sería el punto de reunión de la organización y los donostiarras interesados en crear una nueva compañía de tamborrada podrían acudir al lugar a informarse, a buscar txarangas para los ensayos, a realizar pedidos de modo conjunto con otras agrupaciones y a llevar a cabo otras actuaciones que, hasta el momento, siempre se han ejecutado de modo separado, cada una por su lado.

El museo, según el proyecto actual, estaría abierto al público solo los fines de semana mientras que dejaría los días laborables para que acudiesen los centros escolares a conocer la historia y curiosidades de la fiesta donostiarra. Además, se prevé que la instalación esté clausurada en los meses de enero, febrero y marzo, coincidiendo con la celebración de la fiesta patronal y semanas posteriores.

Por el momento, se han unido al Patronato del Museo Histórico de la Tamborrada formaciones clásicas como la Unión Artesana, cuya tamborrada cumplió 150 años. Kañoyetan, Aitzaki y otras más modernas como la Casa de Galicia, el Colegio de Ingenieros o 14 Gurutze, una de las más recientes. También forman parte del Patronato del Museo Histórico de la Tamborrada compañías infantiles como Aldapeta María Ikastetxea (antigua Summa/Marianistas), Jesuitas, Mary Word, Zurriola Ikastola, Larramendi y Herri Ametsa.

Pero el Patronato del Museo Histórico de la Tamborrada aspira a que todas las compañías que lo deseen se unan a la propuesta. Queda tiempo, ya que en el proyecto presentado al Ayuntamiento se contemplan distintos pasos, necesidades e incluso presupuesto, para la nueva infraestructura.

Además de los distintos objetos relacionados con la Tamborrada donostiarra, el Museo Histórico de la fiesta pretende reunir material audiovisual con el que divulgar su existencia así como los detalles de los orígenes de un particular festejo, cuyos orígenes se remontan a 1836, según algunos expertos.

Así, el primer vídeo sobre la Tamborrada, que se grabará en el encuentro del domingo 12 de diciembre en los jardines del Palacio de Aiete, se centrará en una de las teorías sobre el origen de la fiesta, el que lo sitúa en el sonido de los tambores que tocaban los soldados franceses en 1808 en el cambio de guardia y la respuesta de las aguadoras donostiarras.

Pero los creadores del museo no se cierran a las otras teorías sobre el origen de la fiesta, como la que señala que donostiarras de distintos oficios que iban a por agua con sus barriles a la fuente de Koskas, junto a la iglesia de San Vicente, y soldados de acuartelamiento aporrearon sus recipientes unidos, acompañados de música alegre en un día de San Sebastián. Aunque la fiesta tiene otros posibles orígenes, todos comparten el hecho de que, fuera el que fuera, se transformó en una comparsa de carnaval y, con el tiempo, en la fiesta masiva de la ciudad.