La huelga de trabajadores de Servicios de Txingudi-Txingudiko Zerbitzuak (Txinzer), convocada por el sindicato ELA, mantiene un amplio seguimiento durante esta semana, según ha informado la central sindical.
Los y las trabajadoras han intensificado sus protestas, al considerar que la empresa ha “vaciado de contenido” la negociación del convenio. ELA denuncia que en la última mesa negociadora, celebrada el 13 de junio, la dirección excluyó del debate aspectos estructurales como los salarios, amparándose en criterios del Consejo de Administración, lo que para el sindicato supone un bloqueo directo del proceso.
Las movilizaciones comenzaron antes del verano, ante lo que la parte sindical describe como "una actitud de retraso y obstrucción por parte de la empresa". Entre las reivindicaciones planteadas figuran la recuperación del poder adquisitivo perdido, incrementos salariales superiores al IPC, complementos para alcanzar el 100% del salario durante las bajas, cláusulas que garanticen el cumplimiento del convenio, limitación de la subcontratación y mejoras en horarios, calendarios, permisos y licencias, así como el teletrabajo y la equiparación de categorías equivalentes en la tabla salarial.
ELA asegura que los salarios y condiciones de la plantilla de Txingudiko Zerbitzuak están "lejos de los que se aplican en el Ayuntamiento de Irun", pese a que la empresa se remite a distintos acuerdos municipales.
Durante estos días de huelga los y las trabajadoras han llevado a cabo varias acciones. Por un lado, el lunes hubo una movilización frente a la empresa, mientras que martes se celebró una asamblea y hoy han realizado una caravana de coches por Irun y Hondarribia, seguida de una concentración ante la Oficina de Atención Pública de Irun. Mañana la protesta se trasladará a Hondarribia, frente a la sede de Abotsanitz, y el viernes culminará con una concentración ante el Ayuntamiento de Irun.
El sindicato exige a la empresa y a los ayuntamientos implicados una negociación “sincera y con contenido” y advierte de que seguirá impulsando movilizaciones hasta lograr un convenio que mejore las condiciones laborales. En este sentido, ELA ha anunciado nuevas jornadas de huelga para diciembre y enero, y no descarta intensificar los paros si no se producen avances.