En Gipuzkoa hay una gran afición al montañismo, pero pocos pueden presumir del currículum del urretxuarra Santi Usabiaga: ha subido todos los montes de Euskal Herria y ha estado también en los Andes, los Alpes, los Pirineos y Sierra Nevada, entre otros.

El yerno, la hija y la mujer de Usabiaga, con Urzelai, el día que subieron a Okabe. | FOTO: SANTI USABIAGA

Usabiaga fue jugador de baloncesto antes que montañero. “Comencé en el Goierri y llegué a jugar en el Fórum de Valladolid. Cuando regresé de allí volví a jugar en el Goierri, pero tuve una lesión. Me dijeron que si quería seguir jugando tenía que operarme y decidí dejar de jugar al baloncesto”, recuerda.

Se quitó las zapatillas y se calzó las botas de monte. “Empecé a ir al monte con los vecinos del portal (vive en la calle Elizkale de Zumarraga). Por aquel entonces éramos parejas jóvenes. Iba con Juanjo Arriaran, José Ignacio Lizarraga Naparra... y he andado con mucha otra gente. He ido mucho al monte con Juanito Urzelai y con José Mari Berasategi Unanue. Y con mi mujer, claro”.

Estas últimas décadas ha ido al monte todos los fines de semana. A menudo, dos veces: el sábado y el domingo. “Durante la semana preparaba dos salidas: una por si hacía buen tiempo y otra por si hacía malo. En aquellos tiempos no se podía saber qué tiempo iba a hacer el fin de semana. Cuando hacía malo iba a un monte con antena, pues estos montes suelen tener pista de acceso”.

El reto de los montes de Euskal Herria lo inició en 1989 y lo concluyó el 23 de julio de 2006: el día en el que cumplió 50 años. “El último monte de la lista fue Okabe, un monte emblemático de Euskal Herria”.

Pero, ¿cómo arrancó este reto? “En 1989, en el Kilometroak de Oñati, en la librería de la plaza del pueblo, vi el libro Catálogo de cimas de Euskal Herria. En él venían 968 montes. Empecé a subirlos uno a uno y... en cada salida subía un monte. No aprovechaba cada salida para subir el máximo número de montes. Mi objetivo era conocer bien Euskal Herria. Por ello, subí Aizkorri por un lado y Aitxuri por otro. Lo mismo hice con Izaspi y Samiño, Pagasarri y Ganekogorta...”.

El más difícil

El monte que más le costó subir fue Peña Karria. “Está al lado de Espejo. Fui con Juanjo Arriaran y Xabier Barriola. Tuvimos que llevar cuerdas. Juanjo tiene mucha experiencia con las cuerdas”.

Lexantzumendi, en Zuberoa, no presenta dificultades técnicas, pero llegar allí no es nada fácil. “Es el monte que está más lejos de Urretxu y Zumarraga. Está a 211 kilómetros. Tuve que hacer 422 en coche para ir a un monte que se sube en 40 minutos”.

A algunos montes ha tenido que ir dos veces. “Cuando fui al monte que se conoce como El Helicóptero, cerca de Salinas de Añana, unos cazadores me recomendaron no subir. Me dijeron que estaban de batida, que en la zona de arriba estaban los mayores del pueblo y que esos le disparaban a todo lo que se movía. Decidí volver a casa. Volví la semana siguiente”.

En el monte Peña de Sangüesa también tuvo problemas. “Creo que el monte pertenece a un gallego. Lo tiene cercado y no se puede pasar. Llamé a la Diputación Foral de Navarra y me dijeron que si iba por el camino nadie me podía decir nada. Que si tenía algún problema, llamara a la Guardia Civil de Sangüesa. Fui con Urzelai, Berasategi y mi mujer. Había una puerta, pero decidimos seguir adelante. En la bajada, se nos acercó un 4x4 a toda pastilla. Bajó un hombre de Europa del Este y se nos enfrentó. Nos preguntó a ver cómo habíamos pasado. Para aclarar el asunto, le propuse llamar a la Guardia Civil de Sangüesa. Ahí se acabó la discusión. Le dije, en bromas, que detrás de nosotros venían los alumnos del colegio del pueblo. Cómo se puso...”.