ondarribia se transformará notablemente en los próximos quince meses, gracias a un potente bloque de reurbanizaciones que el Gobierno municipal anunció ayer. Se trata del proyecto Kalez Kale Hondarribia Hobe-tzen, que busca mejorar cinco zonas de diversos barrios de la ciudad atendiendo a los criterios de sostenibilidad de la Agenda 2030, dando prioridad al peatón con aceras más anchas y ofreciendo nuevos bidegorris para fomentar los desplazamientos en bicicleta.
Los cinco ámbitos de actuación de la iniciativa son los entornos de Donostia kalea, Kosta kalea, Gibeleta, Harresilanda kalea y Sabin Arana kalea, con un presupuesto total que suma algo más de 3,3 millones de euros. En el marco de las actuaciones, además, se renovarán las redes de abastecimiento de agua, la iluminación y los drenajes.
El alcalde Txomin Sagarzazu presentó ayer el proyecto, destacando los esfuerzos de coordinación que su elaboración ha supuesto para los departamentos municipales, a los que agradeció su labor, así como el papel participativo de la ciudadanía hondarribiarra.
Por su parte, el edil de Movilidad, Juan Luis Silanes, subrayó que con la iniciativa se refuerza la estrategia de creación de corredores y entornos escolares seguros que el Ayuntamiento ya venía desarrollando en los últimos tiempos. "Además, mejoramos la interconexión de la malla ciclable de Hondarribia", explicó el concejal, añadiendo que el proyecto fue presentado la semana pasada a la Mesa de Movilidad.
En cuanto a los plazos, el inicio de dos de las obras está al caer. El próximo lunes, 7 de marzo, los trabajos comenzarán en Donostia kalea y Kosta kalea. Para el resto de entornos habrá que esperar un poco más: la mejora de Gibeleta se ejecutará entre mayo y junio, la del ámbito de Harresilanda entre junio y septiembre y la de Sabin Arana kalea entre enero y julio de 2023. Por tanto, desde el inicio de las primeras actuaciones hasta la finalización del proyecto pasarán quince meses en los que Hondarribia renovará su imagen.