run sumó a principios de noviembre un nuevo título internacional a su palmarés, con la victoria de Julián Martín en la categoría más de 40 años y menos de 75 kilos del campeonato mundial de culturismo natural celebrado en Llíria (Valencia). Si bien se trata de una disciplina todavía poco conocida, la popularidad del culturismo natural ha seguido una tendencia al alza en la última década, diferenciándose del culturismo convencional por la prohibición estricta del consumo de sustancias químicas que mejoran el rendimiento físico.

"En el culturismo clásico no hay ningún tipo de control, se puede utilizar cualquier sustancia", explica Martín a NOTICIAS DE GIPUZKOA. El irundarra se introdujo en el mundo del culturismo a los 19 años, participando en el certamen vasco-navarro, en el que quedó último de los tres participantes de su categoría. "Luego mi monitor, Alfredo Goikoetxea, y yo nos enteramos de que había campeonatos naturales y decimos ir a esos", rememora el campeón.

No obstante, a finales de la década de los 90 los controles no eran tan estrictos como ahora, ni siquiera en la disciplina natural. "Nos pasaba que veíamos a participantes que, ya solo visualmente, era muy claro que iban dopados", asegura Martín, que aboga por que a todos los deportistas se les realicen analíticas de sangre antes de competir para comprobar que no hayan hecho uso de sustancias no permitidas, cosa que no ocurre todavía.

"Me desanimé, porque no estaba seguro de que iba a competir con gente que estaba en las mismas condiciones que yo", confiesa el irundarra, que dejó la competición hasta hace pocos años, en 2017. En los años previos Martín había finalizado ciclos formativos de Educación Física y de Dietética, por lo que el deportista quería comprobar hasta dónde llegaban sus conocimientos, preparándose el mismo para competir. Entonces quedó quinto, pero tampoco se quedó satisfecho con la organización.

Más recientemente, a principios de 2021, Martín se interesó por las competiciones organizadas por la Asociación Española de Culturismo Natural (AECN), cuyo criterio para la realización de controles a los participantes convence más al irundarra. De esta forma, Martín se presentó al Campeonato de España, en el que obtuvo el segundo puesto y un pase para el mundial de Valencia. Allí sí, quedó primero.

"Fue una sorpresa enorme, porque había gente de mucho nivel", explica el campeón, que gracias a su victoria a obtenido un carné Pro para participar en los torneos profesionales, lo que supone para el irundarra "una motivación extra".

Actualmente, su plan no es otro que seguir entrenando y mejorando, al tiempo que ayuda a otros a hacer lo mismo como monitor de sala del gimnasio Metropolitan de Donostia o con entrenamientos personalizados, que pueden acordarse a través de Instagram (@jmatrainer).