Este sábado comenzarán de manera oficial las obras de la nueva estación de Irun, un nuevo edificio que sobrevolará la playa de vías. Los trabajos se prolongarán durante dos años y medio, y ya desde este mismo sábado los usuarios de los distintos servicios de Renfe, incluida la línea de Cercanías Irun-Brinkola, deberán acceder a la estación por las escaleras mecánicas que conectan la zona ferroviaria y la plaza Txanaleta desde la trasera del centro Kunsthal.

El Cercanías, desde el edificio internacional

Este viernes queda clausurado el acceso desde la calle Estación a los servicios de Cercanías, que se suelen desarrollar entre las vías 1 y 4. En la primera fase de las obras estas vías quedarán sin servicio y los Cercanías partirán desde las vías 6 y 7, las más próximas al conocido como edificio internacional, que hoy alberga las líneas de largo recorrido. En este mismo punto se instalarán las máquinas expendedoras de billetes de Cercanías.

Acceso peatonal, vehículo privado y taxis

Las obras de la estación también van a afectar al tráfico rodado en el paseo de Colón, ya que a la altura del puente del ferrocarril junto a la plaza Txanaleta, los cuatro carriles de circulación se han reducido a tres: dos en sentido al Centro de la ciudad, y uno de salida. El cuarto carril se destina al servicio de viajeros de la estación, tanto taxis como el vehículo privado, que podrán emplear este espacio para la bajada puntual de pasajeros del tren. La parada de taxis permanente junto a la estación de Cercanías se traslada al número 13 de la calle Estación.

Autobuses desde la estación

En lo que se refiere a las líneas de autobús que llegan y parten desde la Estación (Alsa, Secorbus y Bilmanbus), permanecerán en su punto habitual hasta nuevo aviso, en torno al verano de 2024. La Estellesa y La Burundesa, por su parte, suprimen desde este 24 de noviembre la parada del aparcamiento de la estación y mantienen el resto de paradas en Irun.

En este tiempo de las obras, adjudicadas a la UTE Obrascon Huarte Lain (OHL) y Construcciones Aldolfo Sobrino por 65,3 millones de euros, derribarán la actual estación de Cercanías y los servicios que alberga, así como la construcción de los módulos 2 y 3 de la nueva estación, los que albergarán el hall principal. Además, en esta misma zona se ubicará el nuevo aparcamiento y la nueva estación de autobuses de la ciudad.

Concluida la primera fase de la obra con los módulos 2 y 3, llegará el turno de demoler el edificio internacional, que es donde se elevará el módulo 1 de la futura estación, con los andenes 3, 4, y 5.

160 años ligados al tren

El ferrocarril llegó a Irun en 1863, cuando con el tramo Irun-Donostia se completó la línea desde Madrid hasta la frontera con el Estado francés. Ambos sistemas ferroviarios quedaron conectados un año después. Hay que tener en cuenta que el ancho de vía español es más estrecho que el internacional, por lo que hoy en día Irun y Hendaia forman en algunos servicios una misma estación de facto, ya que la vía internacional llega hasta Irun, prolongando algunos servicios de la SNCF francesa, y viceversa: el ancho de vía español llega hasta Hendaia.

Hoy en día se desarrollan trabajos en el ferrocarril desde Irun hasta Donostia para la instalación de un tercer hilo que permita que trenes de ancho internacional lleguen hasta la capital guipuzcoana. Dichas obras, que requieren adaptar el gálibo de varios túneles como el de Gaintxurizketa, acumulan años de retraso.

Dicha dilación afecta de lleno al servicio de Cercanías entre Lezo-Errenteria e Irun, que acumula quejas de las personas usuarias, así como a las líneas de media y larga distancia que antes de las obras tenían origen y destino Irun, y que son motivo de preocupación entre distintos sectores económicos y sociales de la ciudad irundarra, donde se confía que con el final de las obras del tercer hilo vuelva a recuperar su posición.