Lasarte-oria - ¿Cómo se animó a aprender a tocar la gaita?

-Tengo familia en Galicia, mis abuelos son de Galicia y la familia por parte de mi padre es gallega. Desde pequeña he ido de vacaciones a Galicia y sus tradiciones, al igual que las vascas, también se me han pegado. Desde siempre me han gustado las tradiciones gallegas, como los bailes gallegos, que también practico, y la gaita. Desde pequeña me ha gustado este instrumento y lo he querido tocar.

¿Resultó difícil encontrar un profesor que le enseñara a tocar este isntrumento?

-No conocía ningún sitio en el que pudiera aprender a tocarlo en Euskal Herria, hasta que un día tuvimos una comida en la Casa Galicia (Donostia), que yo no sabía ni que existiera la Casa Galicia, por el cumpleaños de una prima de mi padre. Estábamos comiendo y, casualidad, entró el grupo Trisquele. Les vi a todos vestidos de gallegos y tocando la gaita y decidí informarme un poco. Vi que enseñaban gaita y bailes gallegos.

¿Cuándo empezó a tocar la gaita?

-Llevo desde los doce años. Primero empecé con los bailes gallegos y más tarde empecé con la gaita. Llevo tres años con este instrumento.

¿Qué peculiaridades tiene este instrumento respecto a otros?

-Para mí es un instrumento complicado, porque aparte de la gaita yo toco el pandero y comparándolos es mucho más complicada la gaita. Hay que temperar, controlar la fuerza que haces con el brazo y con el aire, y además tienes que ir tocando. Hay que tener mucha coordinación, tienes que ir cogiéndole el tranquillo y no parar de aprender.

¿También toca la trikitixa y el pandero?

-Empecé con la trikitixa, pero lo dejé, y ahora sigo solo con el pandero. También hago bailes vascos. Sigo las dos tradiciones, tanto la vasca como la gallega. Las dos tradiciones me gustan mucho, es lo que he visto en casa y lo que me han inculcado porque la ama es de aquí y el aita es gallego. Pues al final, medio y medio.

Así no hay pequeñas rencillas en casa.

-Eso es (risas).

¿Qué le dijo su familia que vive en Galicia cuando supo que tocaba la gaita?

-Mi familia está encantada. Que una chica de su familia siga con estas tradiciones les gusta mucho y les hace ilusión.

¿Hay alguna otra persona en su familia que toque este instrumento celta?

-¡Qué va! Soy la única que hace bailes gallegos y que toca la gaita. Ya que empecé a bailar en la Casa Galicia, decidí también empezar con la gaita.

¿Cuando va a Galicia se suele llevar la gaita para tocar allí?

-De vacaciones siempre suelo ir a Galicia, porque tenemos allí una casa y en el pueblo en fiestas o en una romería he solido tocar alguna pieza que otra, pero como todavía soy un poco novel, no me atrevo a tocar mucho. Poco a poco.

¿Dónde suele ofrecer conciertos con su grupo Trisquele?

-Nos suelen llamar de diferentes pueblos: de Errenteria, la última vez tocamos en Lasarte-Oria... Por esta zona suele haber ferias del pulpo y nos suelen contratar. Sobre todo nos suelen llamar en verano, pero también solemos tener otras fechas puntuales como el Día de Galicia en Euskadi o el de Santiago.

¿En el grupo hay otras personas jóvenes que han decidido acercarse al folclore gallego?

-Somos bastantes. En el grupo hay veinte personas, de los que cinco o seis somos jóvenes de mi edad.

¿Cuando salen a otros pueblos, también suelen bailar?

-Normalmente cuando nos contratan, suele ser para tocar la gaita. Luego hay poquitas veces que bailamos. Antes nos solían pedir más que bailáramos, pero últimamente nos piden que toquemos la gaita. Hay un día en el que los diferentes grupos tradicionales -gallegos, andaluces, extremeños- nos solemos juntar en la plaza de la Constitución y entonces tocamos la gaita y también bailamos. Pero cuando nos llaman de pueblos para las fiestas solemos tocar la gaita. Primero hacemos una kalejira o pasacalles y después nos quedamos en un sitio fijo y solemos ofrecer un pequeño concierto.

¿Tiene intención de seguir tocando la gaita?

-Sí, es un instrumento que me gusta mucho.