LOS continuos encontronazos que tienen lugar entre peatones y ciclistas en las zonas de coexistencia hicieron que el Pleno se posicionara en 2011 a favor de crear un "plan de convivencia" para ambos sectores, que incluyese una campaña informativa sobre las preferencias de paso y las prohibiciones en los distintos tipos de bidegorris.
Sin embargo, desde entonces, no se ha llevado a cabo la citada campaña y el desconocimiento de la normativa vigente es patente por parte de numerosas personas, tanto ciclistas como viandantes. Al hilo de esta realidad, la concejala nacionalista Aitziber San Román solicitó ayer al Gobierno de Bildu que diseñe "en el plazo de un mes" el plan "requerido por el Pleno en noviembre de 2011 y octubre de 2012" al que, según recalcó, "el Gobierno municipal no ha dado la respuesta adecuada pese al tiempo transcurrido".
Por ello, el PNV de Donostia presentará una moción con el fin de reclamar el plan de convivencia e "incrementar la sensibilización entre la ciudadanía y el grado de conocimiento de la norma- tiva municipal entre peatones y ciclistas".
Distancia de seguridad
Un metro
La moción pedirá también que se planifique la eliminación de los puntos negros, aquellos lugares en los que los conflictos entre peatones y ciclistas son más frecuentes. Asimismo, hará hincapié en la necesidad de que los agentes de la Guardia Municipal y de Movilidad intensifiquen sus esfuerzos para hacer cumplir los artículos 12, 46 y 48 de la Normativa Municipal de Circulación.
Estos artículos recuerdan que los peatones deben cruzar las calzadas y zonas ciclistas por las zonas señalizadas y que deben cerciorarse de que pueden hacerlo sin riesgo en el caso de las calzadas. Por su parte, las bicicletas deberán circular siempre por las vías ciclistas o itinerarios señalizados en zonas de prioridad peatonal y, allí donde no existan, lo harán por la calzada.
Asimismo, en los itinerarios ciclistas señalizados en las zonas de prioridad peatonal podrán circular las bicicletas siempre que respeten la preferencia de paso de los caminantes, respeten la señalización y la velocidad máxima de 10 kilómetros por hora y mantengan una distancia de seguridad de un metro al rebasar o cruzarse con un peatón.
La normativa municipal también obliga a que las bicicletas estén dotadas de timbre y elementos reflectantes, según dicta la legislación en vigor en la actualidad.
Por otra parte, el Ayuntamiento ha colocado estos días aparcabicis desmontables frente al Kursaal, para que sean utilizados durante el Zinemaldia. "Se trata de una prueba piloto, a través de la que se pretende medir el interés real por el uso de la bicicleta a la hora de acceder a estos eventos", dijo ayer en una nota el concejal de Movilidad, Jon Albizu.
