Tolosa. Los trabajos de urbanización en el barrio Larramendi de Tolosa están llegando a su fin y prueba de ello es que a partir de mañana quedará abierto el túnel subterráneo para el tráfico rodado. Sin embargo, por ahora solo podrá ser utilizado por los vehículos que accedan desde la N-I a Tolosa, es decir, en un único sentido.
Los operarios ya han terminado con los trabajos de construcción del paso subterráneo, que han sido complicados, y la carretera está lista en ambas direcciones. No obstante, en uno de los sentidos faltan algunos trabajos por realizar, como colocar la barandilla. Si se abriera la carretera en las dos direcciones, no sería posible llevar a cabo esas últimas actuaciones. Por ahora se ha optado por abrir la carretera en una dirección, ya que las condiciones en las que actualmente circulan los vehículos no son buenas. Por tanto, los coches que salgan desde Tolosa a la N-I deberán hacerlo como hasta ahora, por la calle Uzturre.
Las obras marchan a buen ritmo y se espera que se cumplan los plazos y el proyecto en su totalidad esté terminado para el mes de octubre. "Se trata de una obra de envergadura y siempre puede haber contratiempos, pero por ahora esperamos que toda la obra, incluyendo la urbanización, esté lista para octubre", manifestó el alcalde, Ibai Iriarte.
La anchura total en calzada soterrada es de 6,90 metros, divididos en dos carriles de 3,45. El paso se ha mejorado mucho con relación al proyecto inicial, ya que es más corto y la anchura mayor.
El soterramiento de la calle Larramendi permitirá obtener unos 1.000 metros cuadrados para crear un amplio espacio peatonal que podría llegar a los 15.000 metros, uniendo dos plazas, la de Arkaute y la nueva que surge de este enlace subterráneo. En dicha plaza central se crearán diferentes zonas o ambientes; un parque infantil, habrá zonas verdes, un rincón cubierto... En definitiva, se trata de ofrecer zonas de esparcimiento, con espacios libres y peatonales, a un barrio con una alta densidad.