Guerra por el Mundial 2030: Anoeta, en el punto de mira
Las instituciones españolas prosiguen en su intento de rescatar a Valencia y Vigo cueste lo que cueste
No hay semana sin sobresaltos en los preparativos por el Mundial 2030. Cuando no es el debate en torno a la sede de la final, que Marruecos insiste en quedársela en el majestuoso Gran Estadio Hassán II, es el número de estadios que España quiere disponer. La cifra está cerrada en once, pero los juegos de equilibrios no se sabe si de la RFEF, el Gobierno español o de quién, con el intento de incluir a Valencia sobre todo, ponen la lista en cuestión de puertas para adentro. Otra cosa es lo que opine la FIFA, poco dada a zarandajas domésticas, que publicó su informe de evaluación de las sedes en noviembre y lo aprobó su Congreso en diciembre.
La lista incluye tres estadios portugueses (Lisboa -2- y Porto), seis marroquís (Agadir, Casablanca, Fez, Marrakech, Rabat y Tánger) y el resto, 11, en suelo español: A Coruña, Barcelona (2), Bilbao, Donostia, Las Palmas, Madrid (2), Málaga, Sevilla y Zaragoza. Pese a los intentos de incluir otras sedes, como la de Valencia, tanto la ciudad del Turia como Vigo han sido las dos principales ciudades que han quedado fuera de la carrera.
Desde su llegada a la presidencia de la RFEF días después de que el Congreso de la FIFA certificara las 20 sedes de la candidatura, Rafael Louzán ha insistido en reabrir la candidatura. Tres meses después, el diario El Mundo destapa un supuesto escándalo basado en criterios técnicos alterados a última hora que se topa de bruces con la realidad del informe que lleva el sello de la FIFA.
La FIFA visitó las aspirantes
Si según el rotativo, que se basa en dos listados de los últimos días antes de cerrar la selección de 11 sedes, Balaídos tenía la peor puntuación técnica de aquellos once estadios y Anoeta, justo la siguiente, en el dossier de la FIFA (acceda al PDF íntegro), elaborado después de visitar in situ todas las sedes propuestas, el Estadio de Amara recibe una valoración técnica de 3,8.
Por debajo de la media de la candidatura (4,1), esos 3,8 puntos sitúan a Anoeta por encima de La Rosaleda (3,7), RCDE Stadium (3,6), Riazor (3,4) y a la par de Zaragoza (3,8).
La publicación de El Mundo este lunes, presentada como “La RFEF ‘expulsó’ a Vigo del Mundial”, asegura que en la reunión de miembros de la Federación Española elaboraron una tabla en la que estaba Vigo y no así Donostia, que fue incluida en una versión posterior.
El rotativo explica que los técnicos siguieron los criterios de sedes empleados en la última candidatura adjudicada, la de Brasil 2027 (“con un 80% de criterios técnicos y un 20%, los documentales”), si bien el Gobierno español había pedido ponderar en un 35% los “criterios estratégicos”.
El diario El Mundo cita un correo electrónico interno en el que una responsable de la candidatura explica al entonces vicepresidente federativo y actual presidente, el gallego Rafael Louzán, que el Ejecutivo español habría reclamado “premiar” las sedes que estuvieran cerca de los otros dos países anfitriones. Un criterio poco general y del que resultaba gran beneficiario un estadio como Balaídos y una ciudad como Vigo, cuyo alcalde, el exministro socialista Abel Caballero, ha hecho de la cuestión una bandera.
Más aún, hasta tres de los 13 estadios que aparecen en la relación ven modificada su valoración entre la primera imagen y la que se presenta como lista definitiva: además de Anoeta, que pasa de 10,1226 puntos a 10,6026, RCDE Stadium, donde juega el Espanyol y mejora de 11,2626 a 11,5804, y La Nueva Condomina, que no pasó el corte, también lo hace de 0,1556 a 0,3880.
La FIFA, clara con Anoeta: lista para unos cuartos de final
Lo cierto es que una baremación definitiva del estado de las sedes, según la respuesta que la RFEF da al rotativo madrileño (“se afinaron algunos criterios objetivos de acuerdo con lo establecido por la FIFA”), mejoró la puntuación técnica de Anoeta, lista para acoger el Mundial salvo la ampliación pendiente en 2.000 localidades que el presidente de la Real, Jokin Aperribay, ya ha anunciado. Con los trabajos que supondrán el reajuste en algunas esquinas, el Estadio de Amara superará así el mínimo de 40.000 asientosdisponibles para un partido de la fase de grupos.
Más aún, la evaluación de la FIFA ve a Anoeta preparada para acoger unos cuartos de final pese a sus graves problemas de acceso mediante transporte público y de alojamiento, subsanables por ciudades del entorno.
Anoeta, lista para unos cuartos de final del Mundial
Valencia y Vigo, a la carga
En el caso de Vigo, fue en 2015 cuando el propio Caballero y el entonces presidente de la Diputación de Pontevedra, el mismo Rafael Louzán (PP) que hoy preside la RFEF, firmaron el convenio para arrancar las obras de Balaídos. Diez años más tarde, los trabajos han entrado en la última fase, la reforma de la grada de Gol, que estará disponible para finales de la temporada 2026/2027 y llevará el aforo del estadio vigués a los 28.000 asientos.
El secretario de Estado para el Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, ha vuelto a la carga con Valencia y Vigo este mismo fin de semana. “Me parece que Valencia tiene que estar en un Mundial porque es un proyecto no sólo de fútbol o de deporte. La tercera gran ciudad de España tiene que estar”, expresó el presidente del CSD, que también incluyó a la ciudad más poblada de Galicia: “Nuestra apuesta es esa, también por Vigo, yo creo que además como quedan unos años por delante, todas las candidaturas tienen que ir haciendo los deberes. No sabemos si todas los van a hacer”.
Una hipótesis que lejos de poner a Anoeta en el punto de mira, sitúa a otras sedes como La Rosaleda, que tiene que hacer una reforma que puede rondar los 200 millones de euros, o Riazor, que todavía redacta el proyecto de reforma anunciado en 2022 pese a las discrepancias del club, un Deportivo que considera que quedará un estadio demasiado grande, al pasar de los 32.500 asientos a los 48.000.