donostia - Como si de una carrera académica se tratara, cuatro años después de estrenarse en el fútbol aficionado, la Universidad de Deusto está a punto de lograr el graduado. El Deusto Donostia Football Team concluirá hoy ante el Vasconia su cuarta temporada en las categorías inferiores, la tercera consecutiva en Regional Preferente (antigua Primera Regional), con un proyecto cada vez más consolidado.

El club se puso en marcha en la campaña 2012/2013 después de dos años largos de gestación y arrancó desde la división más baja: Segunda Regional. Ese primer año consiguió el ascenso a Preferente y sembró el camino para que la iniciativa no fuera flor de un día. Hoy, el Deusto Donostia Football Team ya puede presumir de que solo seis de los 25 jugadores de la plantilla no son alumnos de la universidad y se marca el objetivo de atraer a todo el talento, es decir, a los mejores futbolistas que cursan estudios en el campus, ya sean de otros clubes de División de Honor Regional e incluso de Tercera. “Cada vez nos cuesta menos atraer a futbolistas. Ven que hacemos las cosas bien y llaman para jugar”, explica Jon Ojanguren, exjugador del Lengokoak y fundador del club.

deporte universitario Ojanguren importó la idea tras estudiar su último año del Grado de Comunicación en EEUU. Las universidades americanas llevan siglos de ventaja a las europeas a la hora de estimular entre los alumnos la práctica del deporte de competición en sus propios centros. El deporte universitario es un fenómeno de masas que ha creado iconos mundiales. De regreso a casa y con el proyecto en la maleta, Ojanguren tuvo que convencer primero a la universidad de la idoneidad de crear un equipo de fútbol y luego fue llamando a las puertas de futbolistas que estudiaban en Deusto, empresas e instituciones para que apoyaran la iniciativa. “Si tocamos a 100 empresas, 90 dijeron que no”, recuerda. La perseverancia dio sus frutos y hace cuatro años, con el apoyo decidido de la universidad y varios patrocinadores, llegaron los primeros entrenamientos y los primeros partidos en el campo de fútbol de Matigoxotegi, en Donostia.

El equipo tiene, lógicamente, una vocación competitiva pero también su lado académico, ya que da pie a que los alumnos de Deusto de grados como Comunicación, Empresariales o Trabajo Social realicen tareas en el club a modo de alumnos en prácticas. Cinco estudiantes (uno de ellos además es jugador) se encargan de congestionar el club llevando la comunicación en las redes sociales, gestionado las finanzas u organizando actividades sociales, ya sea un partido con inmigrantes o un encuentro con expresos de Martutene. Los alumnos ponen en práctica en el club los conocimientos que van adquiriendo en la universidad. Gracias a esa labor llegaron el acuerdo para que Nike vistiera a la plantilla o para dejar Matigoxotegi y entrenarse en las instalaciones de la Real en Zubieta, donde también disputan sus partidos.

El Deusto Donostia Football Team mantiene un convenio de colaboración con la Real y su fundación, que le permite utilizar los campos de futbol de Zubieta a cambio de prestar apoyo a los jugadores txuri-urdin que estudian o han decidido estudiar en el campus donostiarra.

La multiculturalidad que se observa en cualquier universidad también se aprecia en el equipo de Deusto, que tiene en sus filas a cuatro jugadores extranjeros: un italiano y un alemán becados por el programa Erasmus, otro uruguayo y un chino cedido por la Real. El portugués Junior Fernandes es el entrenador después de que Iñigo Domínguez, excolaborador de Juanma Lillo y extécnico de la Real femenina, dejara la dirección del club en enero por cuestiones laborales.

Una vez asentado el club, el Deusto pretende ampliar los convenios que firma con otras universidades para el intercambio de estudiantes e incluir a futbolistas que estudian en universidades norteamericanas. De momento, mantiene vínculos con la Universidad de Santa Clara, en California, un centro potente en el mundo del soccer estadounidense, y no descarta en el futuro incorporar a las filas del Deusto a alumnos norteamericanos para que jueguen en las categorías regionales de Gipuzkoa.