“Somos creíbles, hemos defendido siempre el autogobierno mientras otros decían que era un plato de lentejas”

El Sociómetro refleja un empate a cinco escaños en la comunidad autónoma vasca entre PNV, EH Bildu y PSE. ¿Por qué debería elegir la ciudadanía al PNV, y no a Bildu y PSE?

Porque nos avala nuestra trayectoria y hace falta una voz propia en Madrid. El PSE es una voz subordinada a otra dirección que está en Madrid, y no tiene un programa político propio. Y hemos defendido al mismo tiempo los derechos humanos y el autogobierno, cosa que otros no han hecho. Tenemos credibilidad, nosotros no hemos cambiado. Algunos dijeron durante muchos años que nos vendíamos e íbamos a Madrid a por un plato de lentejas, y se ha demostrado que el camino que se debía seguir era el nuestro. Otros han perdido el tiempo en otras cosas.

En unas generales, al PNV sólo le han ganado en votos partidos estatales, el PSOE y Podemos. En número de votos, siempre ha superado a la izquierda abertzale en la comunidad autónoma. El Sociómetro augura un empate en escaños. ¿Está en riesgo la imagen de liderazgo del PNV en defensa de los intereses de Euskadi, o es la abstención, que ustedes creen que beneficia a Bildu?

El mismo Sociómetro nos dio en mayo mejores resultados de los que obtuvimos; con lo cual, puede apuntar tendencias, pero hay que ver cómo se concretan. El verano tampoco es buena época para la demoscopia. De todos modos, las elecciones generales siempre son complicadas. En 2011, Amaiur tuvo 7 escaños y nosotros 5. Pero en mayo obtuvimos un 35% del voto, un dato que les encantaría tener a Sánchez y Feijóo. Aquí hay partidos que tienen picos y nosotros somos más estables. Yo estoy convencido de que vamos a tener un respaldo más que necesario para, al menos, mantener el grupo (5), y de ahí para arriba.

Usted dice que el PNV siempre ha tenido clara la defensa del autogobierno, pero Arnaldo Otegi dice que el “nivel de abertzalismo” de Bildu lo acredita que Vox los quiere ilegalizar a ellos y no al PNV…

Al que le han dicho a la cara que lo quieren ilegalizar es a mí. No a Otegi. A mí sí me lo han dicho. Y no en una sola ocasión. En varias. Pero el abertzalímetro no lo mido por el deseo de ilegalizar. Vox querrá seguramente ilegalizar también a Podemos, y de abertzales no tienen nada. No sé qué tiene de abertzale en estos momentos Bildu. Nosotros lo hemos sido toda la vida. Hay una cierta obsesión por parte de la izquierda abertzale de asociarnos a eso que llama el bloque del fascismo, y ha utilizado además mi imagen, y sigue diciendo que hay un acuerdo PP-Vox-PNV. Ya está bien de mentir a la ciudadanía vasca. Es tan burdo, que nadie se lo traga. Es su única manera de buscar hueco. La obsesión que tiene la izquierda abertzale en estas elecciones, una vez más, es superar y sustituir al PNV. A mí lo que me preocupa en estas elecciones es que no nos despistemos y que haya una voz independiente y equilibrada que no se vaya a los extremos, con capacidad de negociar firme pero respetuosa en Madrid y que lleve los problemas de la ciudadanía vasca.

¿Se ha entendido el rechazo del PNV a la Ley de Vivienda con el argumento de la invasión competencial?

Que hay invasión competencial no lo decimos sólo nosotros. Lo dicen Junts, PDeCAT, CUP y BNG. Sólo lo niegan Bildu y ERC. Pero, más allá de competencias o no, el efecto de la ley no es bueno. No va a bajar los precios del alquiler. En Donostia, un tercio de los pisos que estaban en alquiler han desaparecido del mercado, los han retirado quienes los ofertaban. Y todos los contratos que se han firmado a partir de la aprobación de la ley han sido con precios muchísimo más altos, porque están pensando que quizás en un momento determinado se topan los precios. El efecto hasta ahora ha sido pernicioso. En el Congreso hay que hacer cosas prácticas como hemos hecho con el acuerdo para que se fueran los militares de los cuarteles de Loiola, y hemos conseguido muchos metros cuadrados.

El líder del PSE, Eneko Andueza, agita el temor a que se produzca aquí un proceso soberanista a la vasca a modo de reacción a un Gobierno PP-Vox, y dice que el PNV se iría “al monte” para reaccionar a la recentralización. ¿Está abocado el PNV a iniciar un choque con el Estado si gana el PP y gobierna con Vox

Me parece que no es una buena táctica la de Andueza. Yo tendría mayor confianza en las posibilidades de que haya mayorías alternativas y otro tipo de números en el Parlamento. Creo que la partida no está finalizada. Evidentemente, si fuéramos a esa hipótesis de un Gobierno PP-Vox, las medidas que intentaría llevar a cabo en el ámbito lingúístico, en el cultural o el autogobierno iban a ser muy problemáticas y buscarían choques. Tendríamos que confrontar. Nosotros estamos para defender el autogobierno. Vamos a ser firmes en nuestras convicciones y decir por aquí no. Si eso luego va evolucionando, ya veremos, pero si a lo que se refiere su pregunta es a que de repente aquí las políticas cambian de un día para otro, el PNV tiene una línea y está muy convencido de su línea equilibrada. Esta misma pregunta se nos podría haber hecho en el momento de mayor efervescencia del procés y, sin embargo, actuamos como creíamos que era más conveniente para la ciudadanía vasca. Nos distinguimos por ser equilibrados en las decisiones. Ahora, también firmes y con absoluta convicción de que ninguno de nuestros derechos se pisa: autogobierno y derechos humanos, lengua, cultura...

En el programa del PSOE no hay ninguna propuesta sobre las transferencias, ni para el encaje de Euskadi y Catalunya, y propone una Ley de Cohesión Territorial. ¿Hay un giro en ese sentido?

Es una propuesta muy peligrosa esa ley. Sí hay un giro, que se ha dado con los votos favorables de Bildu y ERC, que han hecho una dejación absoluta con tal de que hubiera políticas de izquierdas. Y Sánchez va haciendo su España federal. En mayo se jactó de intervenir en políticas que no le correspondían. Ha planteado medidas para crear un marco y, a partir de ahí, ocupar todo el espectro legislativo. Y es lo que pretende hacer ahora con la Ley de Cohesión Territorial, que es otra Loapa. Por aquí no vamos a entrar. Va a ser una legislatura muy dura en el ámbito del autogobierno.

¿La propuesta del PNV del reconocimiento nacional y la bilateralidad también podría ser una solución para Catalunya?

Bueno, los catalanes tendrán que decirlo. Esta es la nuestra. Es abordable desde el punto de vista constitucional: el reconocimiento nacional, la bilateralidad y un árbitro neutral como en el Concierto Económico.

Usted ha puesto el foco en la sostenibilidad de las pensiones y en la transferencia de la gestión del régimen económico de la Seguridad Social. ¿Está anticipando que tiene que resolverse ya en la nueva legislatura? ¿Esto va a tener que hacerse sí o sí dentro de ese acuerdo que usted mencionaba que tenía que ser más concreto y con mayores garantías si vuelve a gobernar Sánchez?

Habrá que arbitrar garantías, porque él propuso un calendario de transferencias que luego no ha cumplido, y están en el Estatuto. La referida a la Seguridad Social ni se quiere explorar. Cuando se nos dice que sería deficitario, ¿dónde no es deficitario el sistema de pensiones? Examínese por comunidades. Sin romper la caja única, creemos que podemos gestionar mejor ese dinero, sacarle más rendimientos y administrar de mejor manera las pensiones e incluso asegurar determinados complementos. No tenemos por qué romper la famosa caja única. Podemos explorar vías. Hace falta voluntad. Si vemos la oportunidad, lo intentaremos, pero no sé qué hemiciclo habrá. Sí sé que, si no está el PNV, no se va a hacer nada.

¿Usted da verosimilitud a la hipótesis de que el PSOE se abstenga para permitir que gobierne Feijóo?

Recuerdo el no es no de Sánchez ante Rajoy, el cambio de secretario general en el PSOE, la abstención de los socialistas, el regreso de Sánchez… Si ya tuvo esa actitud entonces, ahora habrá un no absoluto, y por parte de unos y de otros, porque en Extremadura tendría que haberse abstenido el PP ante el PSOE y no lo hizo. Pero esto se trata de llegar a un acuerdo, tendrían que asegurarse unas leyes o los presupuestos, una estabilidad.

¿Sería positiva esa abstención?

Nadie ha comprado lo que dijimos cuando empezó todo en Castilla y León y pedimos que hicieran como CDU en Alemania, no pactar con la extrema derecha. El PSOE tendría que haber pactado un mínimo con el PP y que no dependiera de Vox, pero su opción fue forzarlo a pactar con Vox. Y el PP se lanzó a por el poder.