La apuesta del departamento de Medio Ambiente de la Diputación Foral de Gipuzkoa por la creación de comunidades energéticas sitúa a Gipuzkoa como un referente en el camino hacia la transición energética. No en vano, el presupuesto destinado a este ámbito para el 2023 se verá incrementado en 3 millones de euros con respecto al de este año, lo que va a suponer un total de 10 millones de euros para ayudar en la transición energética a más de 5.000 familias y empresas guipuzcoanas.

El presupuesto destinado a la transición energética para el 2023 será de 10 millones de euros para ayudara más de 5.000 familias y empresas guipuzcoanas.

Lo cierto es que el camino emprendido hacia la transición energética no tiene vuelta atrás. A la experiencia inaugurada hace ya un año en Zumarraga, donde tienen previsto ampliar el número de placas solares debido al éxito de la iniciativa, le han seguido muchos otros municipios entre los que destaca Lasarte-Oria por constituir la mayor comunidad energética de Euskadi al garantizar el acceso a las energías renovables a la totalidad de los barrios de este municipio y posibilitar importantes ahorros a las personas que residen en ellos. El siguiente paso, aclaran desde el departamento foral, es el impulso de comunidades energéticas en el ámbito industrial, para lo cual de cara al año que viene va a establecer una nueva línea se subvenciones para pymes y autónomos.

Lasarte-Oria, un modelo a seguir

La inversión económica total de la instalación de Lasarte-Oria se estima en un millón y medio de euros, aportados por el departamento de Ordenación del Territorio del Gobierno Vasco y el departamento de Medio Ambiente y Obras Hidráulicas de la Diputación Foral de Gipuzkoa, y que se completarán con las ayudas solicitadas a los Fondos Next Generation.

Comunidad energética de Lasarte-Oria

Dicha comunidad energética constará de seis cubiertas cedidas por el ayuntamiento para la colocación de paneles fotovoltaicos. Estas seis instalaciones están estratégicamente seleccionadas para que los barrios del municipio se sitúen en un radio de acción de 500 metros y asegurar el acceso a energía limpia y renovable en régimen de autoconsumo a todos los barrios y zonas del municipio. 

El diputado de medio ambiente, Jose Ignacio Asensio, ha destacado que es el primer municipio en asegurar la transición energética a toda su ciudadanía: “Lasarte-Oria ya es, gracias a este proyecto, un modelo a seguir y una referencia en Euskadi en el ámbito de la transición energética y la creación de nuevos modelos de energía para ciudadanía. La energía es un derecho social y requiere un nuevo modelo que empodere a los hogares situándoles en el centro del sistema energético, facilitándoles el acceso a energía limpia y los instrumentos necesarios para lograr un ahorro económico en su factura”. 

José Ignacio Asensio, diputado de medio ambiente.

“Lasarte-Oria ya es, gracias a este proyecto, un modelo a seguir y una referencia en Euskadi en el ámbito de la transición energética y la creación de nuevos modelos de energía para ciudadanía"

Asensio ha recordado que “especialmente, en tiempos como los que estamos atravesando, con el complicado escenario energético que ha dado lugar a medidas de contingencia energética que afectan a nuestros hogares y comercios, el modelo energético que estamos impulsando ayudará a las familias a aliviar las fluctuaciones de los precios de la electricidad este invierno. El avance hacia la democratización de la energía y hacia una cultura de menor dependencia hacia combustibles fósiles y más eficiente, justa, y sostenible, supondrá una mejora en la calidad de vida de las personas que residen en la zona”. 

"El avance hacia la democratización de la energía y hacia una cultura de menor dependencia hacia combustibles fósiles y más eficiente, justa, y sostenible, supondrá una mejora en la calidad de vida de las personas que residen en la zona”.

Las áreas elegidas para la instalación de las placas son el complejo deportivo Michelin, la ikastola Garaikoetxea Landaberri, la ikastola Sasoeta, el colegio público Zumaburu, el frontón Zabaleta y Basaundi, donde se va a llevar a cabo una regeneración energética de todo el barrio. Estas seis instalaciones sumarán una superficie útil de 4.700 m2, con 1.476 placas que proporcionarán una potencia estimada de 545 kW de energía 100 % renovable y descarbonizada, cuyo reflejo en la factura de más de un millar de vecinos y pequeños comercios locales será del 30 % de ahorro económico.

A largo plazo y con la vista puesta en los objetivos de desarrollo sostenible de Naciones Unidas para 2030, estas instalaciones generarán 13.600 MWh de energía descarbonizada kilómetro cero, ahorrando la emisión de más de 3.500 toneladas de CO2 a la atmósfera, cuyo equivalente sería la plantación de unos 14.000 árboles en el municipio ejerciendo como sumideros de carbono hasta 2030.