La industria guipuzcoana acumula en los tres primeros meses del año un crecimiento de dos puntos porcentuales en comparación con el mismo periodo del año anterior frente a las caídas experimentadas por los otros dos territorios de la CAV, lo que demuestra su capacidad de hacer frente a la difícil situación económica a nivel sobre todo europeo y, tal como ha señalado hoy la Cámara de Gipuzkoa, su facultad para diversificarse con éxito en otras zonas geográficas y otros mercados.
Metalurgia y maquinaria
Esta buena evolución que reflejan los datos facilitados por el Instituto Vasco de Estadística Eustat se deben, en gran medida, a las dos actividades con más peso en el sector industrial guipuzcoano como son la metalurgia, que acumula un ascenso de casi cinco puntos porcentuales, y la maquinaria y equipo con una subida del 4,6%, tal y como destaca la patronal Adegi.
De este modo, el Índice de Producción Industrial de Gipuzkoa se sitúa en los tres primeros trimestres del año como el más alto para este periodo desde 2008 y aventaja con diferencia al que se registra en Bizkaia, donde hasta septiembre cae un 1,5%, y en Álava con un retroceso de 1,8 puntos porcentuales. Junto con las dos actividades industriales principales en territorio guipuzcoano, otros epígrafes también han tenido una aportación positiva como la fabricación de muebles y otras manufacturas, la industria de la madera, el papel y las artes gráficas y el material de transporte.
Cambio de tendencia
Este último capítulo ha tenido un protagonismo especial en septiembre porque ha motivado que la producción industrial crezca un significativo 3,8% respecto al mes anterior, lo que representa un cambio de tendencia tras tres meses consecutivos de caídas. Por último, si se compara septiembre del presente ejercicio con el mismo mes del año anterior, el resultado también es positivo en 2,6 puntos porcentuales. Al igual que sucede con el acumulado del año, en este caso Gipuzkoa es el único territorio en terreno positivo y responsable de amortiguar el debilitamiento de la actividad industrial vasca ante la caída de la demanda de los principales clientes extranjeros.
