El Puerto de Bilbao está inmerso en un proceso de transformación en el que el enfoque medioambiental es uno de los cinco ejes de su Plan Estratégico 2023-2026 junto a la sostenibilidad económica, la retención del talento, el ofrecimiento de unos servicios con valor diferencial y la especialización productiva.

Su ubicación geográfica le convierte en punto de tránsito para los tráficos marítimos de mercancías entre América y el norte de Europa, y viceversa, con la intención de que el desarrollo de nuevos espacios genere asimismo nuevas actividades. Así que la transición energética aparece como una de las tareas obligatorias.

Las energías renovables figuran en la hoja de ruta de la Autoridad Portuaria en el futuro

“En el período entre 2017 y 2020 hemos conseguido reducir en un 66% las emisiones de dióxido de carbono”, explicó Carlos Alzaga, director de la Autoridad Portuaria de Bilbao, entre algunos de los hitos medioambientales en la trayectoria del Puerto, como la puesta en marcha en 2005 del parque eólico en el dique de Punta Lucero.

A largo plazo, en el año 2050, el Puerto quiere reducir “en un 100%” la emisión de gases de efecto invernadero. Para ello, apostará por la generación de energía renovable, principalmente a través de dos vías y en colaboración con el resto de agentes del Puerto: la solar y fotavoltaica, con placas instaladas en las cubiertas de las naves y de los diques, así como la eólica, con aerogeneradores onshore (en tierra) y offshore (en la mar). La inversiones en solar y fotovoltaica, las más sencillas de ejecutar por la infraestructura requerida, supondrán un gasto de 21 millones de euros y están en una fase más avanzada que las eólicas, en período de análisis y con un coste de 35 millones.  

"Queremos ser un referente en la distribución de hidrógeno"

Hidrógeno

Al mismo tiempo, el Puerto quiere posicionarse como un importante agente en el transporte de hidrógeno renovable. En este aspecto, el puerto alberga ya la obras de construcción del Hub de Descarbonización de Petronor, una ambiciosa iniciativa incluida en el Corredor Vasco del Hidrógeno. “Queremos ser un referente en la distribución de hidrógeno”, aseguró Alzaga, que defendió asimismo la importancia de impulsar, sobre todo desde la regulación, la creación de comunidades energéticas.