El termómetro de la economía vasca se situó en agosto en 85,7 puntos, un valor similar al de los meses anteriores meses, de forma que se mantiene en la zona de crecimiento suave, según ha informado el Departamento de Economía y Hacienda.

Durante el verano, las exportaciones mejoraron ligeramente, después de un segundo trimestre de contracción interanual, mientras que la inversión y el consumo de los hogares ralentizaron su crecimiento.

Desde la óptica de la oferta, la industria mostró una evolución positiva, la construcción se frenó y los servicios mantuvieron su senda de crecimiento, aunque con menor dinamismo. El empleo, por su parte, muestra señales de moderación en su positiva trayectoria de los últimos meses.