Graphenea se ha convertido en algo más de una década en líder mundial en el grafeno de alta calidad y pureza con un crecimiento constante que se ha acelerado en los últimos años. El pasado ejercicio cerró con unos ingresos consolidados de 4,8 millones de euros y un incremento del 34% respecto al año anterior que la nueva actividad que se desarrollará en Azkoitia contribuirá a fortalecer.
Con una plantilla de momento cercana a las 40 personas aunque las previsiones son incrementarla, esta empresa guipuzcoana tiene dos líneas de negocio. Graphenea Semiconductor es la primigenia y se define como una fundición de grafeno para elaborar láminas de grafeno, semiconductores, chips de transmisión y óxidos de este material que ha conseguido posicionarse como líder en un mercado cada vez más interesado en este material por sus propiedades.
En 2013 Repsol entró en el capital social de Graphenea con la compra del 10% de sus acciones
La segunda línea se desarrolla por la spinoff Kivoro y consiste en la fabricación avanzada de aditivos para aplicaciones industriales cuyas perspectivas de negocio han motivado la apertura de las nuevas instalaciones en Azkoitia. La creación el año pasado de esta firma representa diversificar las actividades de Graphenea para, de este modo, llegar a nuevos mercados y encontrar oportunidades de negocio.
OFICINA EN EEUU
Graphenea tiene su sede en Donostia y una oficina comercial en Boston, EEUU. Su fundador y consejero delegado, Jesús de la Fuente, considera que esta bicefalia, junto con la creación de un laboratorio para producir chips, son la clave del éxito de la empresa nacida en 2010. Fue entonces cuando Jesús de la Fuente consiguió de empresarios vascos 1,6 millones de euros que, añadidos a un crédito, financiaron esta operación.
Instalada en un primer momento en el CIC nanoGUNE de Donostia, Nokia fue uno de sus primeros clientes a la que siguieron reconocidas compañías mundiales como Toshiba, IBM, Intel o Philips. Uno de los hechos que consolidó su actividad fue la entrada en el accionariado de Repsol en 2013. A través de Repsol Energy Ventures en coinversión con el CDTI, adquirió un 10% de las participaciones mientras que el 90% restante se mantuvo en manos de empresarios vascos. Su fundador de la Fuente sigue siendo el accionista mayoritario con un 25% del capital social.
