El inicio del año no ha sido positivo para el Puerto de Pasaia, cuyo tráfico de mercancías cayó un 9,4% respecto a enero de 2022 y acentúa de este modo la tendencia al descenso que marcó todo el pasado ejercicio. El retroceso, además, casi duplica a la media de los recintos portuarios gestionados por Puerto del Estado, que en conjunto movieron un 5,4% menos de mercancía lo que, según el organismo público, refleja la “ligera desaceleración” del comercio mundial que comenzó a apreciarse a partir de agosto de 2022.
Aún es pronto para determinar si esta bajada será la tónica general del año puesto que son muchos los factores que pueden influir en el devenir de la actividad portuaria guipuzcoana. Sirva de ejemplo que el año pasado se inició con un leve incremento del 0,65% en el tráfico para comenzar, ya a partir de febrero, a registrar consecutivas pérdidas y cerrar el año con un retroceso del 6,4%. Del mismo modo, el descenso de nueve puntos registrado el pasado mes de enero puede corregirse y, tal y como anunciaron recientemente sus responsables, alcanzar a finales de 2023 un crecimiento del 6%.
El presidente de la Autoridad Portuaria de Pasaia, Joakin Telleria; y su director, David Candelario, atribuyeron esta evolución al alza al buen comportamiento que prevén que tenga la siderometalurgia, la principal mercancía que se mueve en la dársena guipuzcoana. Los datos correspondientes al mes de enero se encuentran en la línea de esta expectativa, porque la mercancía general, donde se integra el acero y el metal, es una de las dos únicas que presenta evoluciones al alza, de casi dos puntos en concreto. La segunda es la pesca, otra de las actividades que los responsables del Puerto de Pasaia han potenciado con la construcción de una nueva lonja, que también registra un aumento del 11%.
CAÍDAS GENERALIZADAS
El resto, sin embargo, experimenta retrocesos de diferentes intensidades. Sin ser la más abultada, la caída del 6% en el movimiento de automóviles es significativa porque representa la segunda mercancía en importancia para el Puerto de Pasaia. Los máximos representantes de la Autoridad Portuaria, en cambio, prevén que este tráfico se recupere a lo largo del ejercicio y contribuya a un crecimiento del recinto portuario guipuzcoano. La ausencia de mercancías en tránsito, por su parte, no reviste gravedad puesto que no es muy representativa en este puerto.
Los graneles sólidos, sin embargo, sí tienen un peso específico y caen un 31,7%, mientras que el avituallamiento lo hace en 43 puntos porcentuales. Lo hace, en buena medida, por el retroceso experimentado por los combustibles líquidos de un 64,3%. Esta evolución ha tenido como consecuencia una menor entrada de buques mercantes a la dársena portuaria guipuzcoana que, con 73 barcos, cae casi diez puntos porcentuales.
