La patronal guipuzcoana Adegi se alinea con las previsiones de las instituciones y agentes económicos que estiman una desaceleración para el presente ejercicio y sitúa el crecimiento del PIB de Gipuzkoa en una horquilla entre 0,5 y 2 puntos porcentuales, muy lejos del 4% que avanzó en 2022. El freno en el dinamismo de la actividad empresarial se traduce en una menor creación de empleo, que generará entre 2.000 y 2.500 nuevos puestos de trabajo.
El presidente de Adegi, Eduardo Junkera, ha comparecido hoy en Donostia junto con el director general, José Miguel Ayerza; y el responsable de Competitividad e Innovación, Patxi Sasigain, para dar cuenta de los resultados de la encuesta que trimestralmente la patronal realiza entre las empresas del territorio, en la que se observa que la confianza de las personas consultadas ha mejorado “levemente” con una situación en los mercados mejor de lo que esperaban en septiembre aunque sin alcanzar todavía los niveles anteriores a la pandemia de covid.
La recuperación de los niveles previos al covid se producirá a finales de este año o en 2024
Estos niveles se recuperarán a finales del presente ejercicio o durante 2024, según Adegi, en función de la capacidad de la economía guipuzcoana de crecer. El responsable de Competitividad e Innovación de la patronal guipuzcoana, Patxi Sasigain, señaló que un crecimiento de tan solo medio punto de la economía guipuzcoana dificultaría mucho la recuperación total, que podría darse este mismo año si el PIB asciende un 2%.
Es el tope establecido por Adegi que no coincide con el parecer del Gobierno Vasco. Recientemente, el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, reconoció que deberán revisar a la baja sus previsiones de crecimiento para 2023, fijadas en un principio en un 4%. En cualquier caso, afirmó que espera un incremento del PIB superior a los dos puntos porcentuales, cuando Adegi augura que lo hará por debajo.
La encuesta de coyuntura económica de la patronal recoge los resultados obtenidos por el tejido empresarial guipuzcoano en el último trimestre del año, entre los que se encuentra la subida de la facturación media del 5,8%, motivada en buena parte por el incremento de los precios que se repercutieron en los productos y por el rebote de la industria metálica enfocado en los mercados exteriores. El aprovisionamiento de las empresas se encareció un 3% con respecto al tercer trimestre del pasado año, según consta en los resultados de la encuesta.
También crecieron los pedidos, aunque de una manera muy moderada porque el incremento no llega al punto porcentual, mientras que las inversiones se mantuvieron. A este respecto, Junkera advirtió de que este año la situación cambiará puesto que “aumentan las empresas que van a reducir sus inversiones y son menos las que las van a mantener”. De estas últimas, el 80% destinará una partida presupuestaria a la adquisición de productos informáticos, software y bases de datos y un 75% a la compra de maquinaria y equipo para mejorar su capacidad productiva que, por otro lado, ascendió al 85%, “recuperando el nivel de septiembre de 2019, el registro máximo en años”.
MERCADO LABORAL
El mejor dato, según incidió Junkera, corresponde al empleo. Los resultados de la encuesta afirman que nueve de cada diez negocios tiene intención de mantener o aumentar su plantilla, el registro más alto desde 2019. Una proporción similar considera que su mercado es de normalidad o reactivación, aunque existen factores que les preocupan por su incidencia en la evolución de la actividad. El abastecimiento y precio de las materias primas y de la energía, los elevados costes laborales, la dificultad para contratar personal cualificado y el descenso de la rentabilidad de las ventas son, por este orden, las principales inquietudes.
"Como país, no podemos permitir las altas tasas de absentismo que registra Euskadi!
José Miguel Ayerza advirtió de que surge con fuerza una nueva preocupación, el absentismo laboral que, aunque no se encuentra entre las primeras posiciones, comienza a cobrar relevancia. “Los datos en Euskadi son los más altos del Estado y genera la necesidad de analizar las causas”, señaló.
Tal y como anunciara la patronal vizcaína un día anterior, el pasado jueves, la Mesa de Diálogo Social de la CAV creará un comisión en la que la parte empresarial y los sindicatos abordarán este asunto. “No es cuestión de culpabilizar a nadie, sino de estudiar” las causas que provocan estas elevadas tasas de absentismo, que en Euskadi alcanzan el 9,8% frente al 6,7% de media estatal, según informó el director general de Adegi. “Seguramente no habrá un único factor que lo cause, pero como país no podemos permitir esos altos índices”, dijo.
Aludió a los elevados costes laborales que, según la encuesta realizada por Adegi, afirman afrontar las empresas. Indicó que en Gipuzkoa la industria del metal ha incrementado los salarios un 6,5% para ilustrar “el importante esfuerzo de las empresas para mantener el poder adquisitivo de los trabajadores”.
