- La líder de LAB, Garbiñe Aranburu, reconoce que ELA y LAB mantienen “diferentes visiones” sobre la necesidad de activar un “nuevo ciclo de movilizaciones” que, a su juicio, debe incluir una huelga general, aunque se muestra convencida de que “antes o después” se encontrarán “en el camino”.

Aranburu compareció ayer en Donostia junto al secretario de Acción Social de LAB, Endika Pérez, para dar a conocer la postura del sindicato sobre el proyecto presupuestario vasco que, en su opinión, presenta importantes “déficits”. Insistió en la necesidad de activar un “ciclo de movilizaciones en Euskal Herria” para “incidir” en las decisiones tanto de las administraciones públicas como de la patronal ya que así “se está perdiendo una oportunidad”.

“Tenemos que hacer posible aquí, en Euskal Herria, lo que no es posible en Madrid, apostar por transformar las relaciones laborales”, poner en marcha un “sistema público de pensiones y una ley propia de seguridad social”, agregó. En este contexto, Aranburu se mostró convencida de que ha llegado la hora de impulsar nuevas movilizaciones que culminen en la convocatoria de una huelga general y admitió que hay conversaciones con ELA.

“Hay contactos y puede haber diferentes visiones al respecto pero antes o después nos vamos a tener que encontrar en el camino. Estamos convencidas porque la realidad es la que es y las razones ahí están”, subrayó, para dejar claro que, en todo caso, “la pelota no está en el tejado” de LAB.

Aranburu criticó el proyecto de presupuestos del Gobierno Vasco por “impedir la participación social a la hora de su elaboración”, no cumplir su misión redistributiva y excluir la “fiscalidad” de la negociación presupuestaria. Pidió que se ponga fin a la “política de poner dinero en manos privadas sin exigir ninguna contrapartida” y que se articulen medidas efectivas para mejorar los servicios públicos y el sistema de protección social, en concreto, el salario y las pensiones mínimas.