- La guerra industrial, tecnológica y de lobbys entre los principales constructores ferroviarios con plantas en el Estado para acceder al futuro de los trenes de hidrógeno se ha incrementado últimamente ante la oportunidad que supone el acceso a los fondos europeos Next Generation EU para ayudar a crear una tecnología ligada al hidrógeno en el Estado español plenamente competitiva.

El máximo responsable de Alstom España, Leopoldo Maestu, afirma que hay que aprovechar el dinero de los fondos europeos para “traer la tecnología necesaria para desarrollar el hidrógeno a España”. De hecho, la compañía ya ha trasladado al Gobierno español su interés y planes para poder acogerse a dichos fondos de cara a promover el desarrollo e implantación de los trenes de hidrógeno en el país.

El objetivo de Alstom no es utilizar los fondos para fabricar un nuevo tren, sino para importar el know how del primer tren de hidrógeno desarrollado en Alemania por la compañía, el Coradia iLint, con el fin de validar la introducción del hidrógeno en el ferrocarril español.

Los primeros trenes en serie propulsados por hidrógeno entrarán en servicio regular en Alemania a partir de 2022. Se trata del citado Alstom Coradia iLint, el primer tren de pasajeros del mundo que funciona con una pila de combustible de hidrógeno para generar electricidad para la propulsión. Este tren incluye otras innovaciones diversas: conversión de energía limpia, almacenamiento de energía flexible en baterías y gestión inteligente de la fuerza motriz y la energía disponible. Con prestaciones equiparables a la de los trenes diesel, el iLint cuenta con 1.000 kilómetros de autonomía y una velocidad máxima de 140 km/hora.