o de cumplir años es una realidad que tiene que ver mucho con el subjetivismo y con la actitud que cada uno tiene a la hora de ver como los almanaques se van agotando. No todos saben cumplir bien los años, sobre todo cuando se empiezan a acumular décadas de existencia. Cruzar el Rubicón de una a otra década provoca en unos, cierta nostalgia por el pasado y en otros, expectación por lo bueno que puede deparar el futuro.
Creo que a Elkargi SGR le ha pasado esto último. Los 40 años que ha cumplido este año, -y que por desgracia no lo ha podido celebrar con la solemnidad que requiere una efemérides de este tipo por culpa del Covid 19-, han servido para rejuvenecerse y reinventarse ante las grandes dificultades. La entidad pilotada por su director general Zenón Vázquez, ha hecho de la necesidad virtud a la hora de resolver a nuestras pymes y autónomos los problemas de financiación y liquidez generadas por una inactividad sobrevenida para poder hacer frente de la mejor de las maneras a la más dura crisis económica jamás conocida.
Los datos de todo ese gran esfuerzo que ha hecho Elkargi SGR desde el inicio de este año y, fundamentalmente, a partir de la paralización de la actividad empresarial en el pasado mes de marzo, se concreta en la formalización de avales por un valor superior a los 900 millones de euros, lo que significa triplicar los avales concedidos en el ejercicio de 2019, donde se cerraron operaciones por un importe de unos 300 millones.
Una gran parte de esos 900 millones de euros, en concreto, alrededor de 700 millones proceden del programa de créditos con aval público impulsado por el Gobierno Vasco y unos 100 millones de las líneas abiertas por el Gobierno de Navarra. Esta actividad avalística, poniendo al máximo rendimiento toda su estructura operativa de un día para otro, ha supuesto superar los avales formalizados en la anterior crisis del año 2009 por Elkargi SGR y que alcanzaron los 653 millones de euros, a los que habría que añadir los gestionados por Oinarri, -absorbida hace cuatro años-, por un valor de 180 millones, totalizando en conjunto un importe de 833 millones.
Este balance, teniendo en cuenta las extremas circunstancias en las que se está desarrollando la actividad de nuestras empresas, pone de relieve el gran valor que Elkargi SGR representa como un instrumento indispensable a la hora de aportar una mayor estabilidad a nuestro tejido productivo de pymes y autónomos. No en vano, la entidad financiera, que cuenta con cerca de 20.000 empresas asociadas, tiene a día de hoy, un riesgo vivo crediticio que asciende a los 1.600 millones de euros, 400 millones más del que se registraba en el año 2019, en plena crisis financiera.
El importante peso que Elkargi SGR tiene en el conjunto de las 18 sociedades de garantías recíprocas del Estado, donde es de largo la primera entidad a gran distancia de la segunda, vuelve a confirmarse con los avales formalizados en este difícil año de 2020, ya que representan el 40% del total de los gestionados por sus homónimas estatales.
La línea de actuación de Elkargi SGR se ha visto reforzada con la decisión del Parlamento Vasco del pasado jueves, en la que todos los grupos políticos presentes en la Cámara acordaron por unanimidad, -algo insólito en estos tiempos de divergencias políticas-, pedir al Gobierno Vasco ampliar el programa de créditos con aval público, más allá del 2020, así como la flexibilización de las condiciones en lo que se refiere a los periodos de carencia y devolución.
En este sentido, las pymes y los autónomos que han concertado un crédito con el aval del Gobierno Vasco, a través de Elkargi SGR, en este año y los que lo hagan en el próximo ejercicio tendrán una carencia de uno o dos años, lo que significa que los préstamos concedidos en la primavera de este año no tendrán que empezar a pagar hasta el año 2022.
Asimismo, se amplía el período de devolución de los cinco años actuales a un máximo de ocho, con lo que se producirá una considerable reducción de las cuotas de amortización, algo que es de vital importancia para las pymes y los autónomos, si la recuperación de la actividad es más moderada de lo que las previsiones apuntan.
La llegada a la dirección general de Elkargi SGR de Zenón Vázquez, en abril de 2019, -tras dos años de cierto parón provocado por un escenario de tipos bajos y gran liquidez monetaria, así como la digestión de la absorción de Oinarri-, ha supuesto todo un revulsivo en la entidad que no se conforma en jugar su papel de instrumento para garantizar de la forma más ventajosa a las pymes y a autónomos sus fuentes de financiación, sino que está ampliando su actividad en el campo del asesoramiento para una mejor gestión de la actividad de sus socios.
Y para ello, Elkargi SGR está en permanente contacto con otros agentes económicos y empresariales no solo a nivel local y estatal, sino también europeo, donde también está presente en favor de los intereses de nuestras empresas. En este sentido, Zenón Vázquez, es desde este año, vicepresidente de la Asociación Europea de Instituciones de Garantía-European Association of Guarantee Institutions (AECM), que engloba a 48 entidades que operan en 29 países diferentes, -23 pertenecientes a la Unión Europea, más Azerbaiyán, Bosnia y Herzegovina, Kosovo, Serbia, Rusia y Turquía-, y que defiende sus intereses tanto en las diferentes instituciones europeas, como en el Banco Europeo de Inversiones (BEI), el Fondo Europeo de Inversiones (FEI), el Banco de Pagos Internacionales (BPI), el Banco Mundial, etc.
La vocación de "aliado financiero", como reza el slogan de Elkargi SGR, no solo se centra en su actividad avalista, sino que vas más allá al ofrecer a sus socios una amplia gama de servicios que tienen su origen en el gran conocimiento que tiene de su actividad empresarial. Por eso, ofrece asesoramiento relacionado con la gestión financiera desde tesorería hasta control de costes y financiación; gestión de la propiedad en empresas familiares, protocolos de sucesión, etc.; procesos de fusión y adquisición de empresas; gestión de subvenciones con el fin de aportar valor a las pymes, etc.
Si en estas cuatro décadas, Elkargi SGR ha sido un importante instrumento de financiación para nuestras pymes, la grave crisis económica provocada por el Covid-19 y la respuesta que ha tenido la entidad respondiendo con rigor y prontitud a los problemas de liquidez de nuestras empresas, le han convertido en un elemento indispensable y vital para nuestro tejido productivo y, por ende, por el gran número de empleos que generan, para nuestro estado de bienestar. Todo un referente estructural en la economía de este país.
