- El Gobierno Vasco destacó ayer que hay “indicios” de recuperación de empleo en la industria pero reconoció que no ha llegado a la hostelería, al comercio y a la educación y a otros sectores más castigados por la crisis sanitaria en los que se auguran “nuevos nubarrones”.

El director de servicios generales de Lanbide, Néstor Arana explicó que los datos del desempleo y los expedientes de regulación de empleo temporales en la hostelería, el comercio y la educación demuestran que estos sectores “siguen pasándolo muy mal” y es “difícil prever cuándo amainará la tormenta”.

Por otra parte, el responsable del departamento económico de Confebask, Pablo Martín, afirmó también ayer que los datos “no han sido buenos y son consecuencia directa del bajo nivel de actividad que registra la economía vasca”. En ese sentido, recordó que “no se puede olvidar que, actualmente, nuestro nivel de producción está al 80% del que era el año pasado, por lo que lógicamente esto tiene su efecto en el mercado laboral”.

Desde su punto de vista, “el comportamiento ha sido, en las grandes cifras, en cierto modo similar con variaciones sectoriales, porque se está viviendo un proceso de una desescalada en sectores como Industria o Construcción pero, sin embargo, hay otros sectores, más ligados a la actividad típica del verano, como hostelería y turismo, u otros de servicios de ocio o culturales, que, desde luego, han tenido un nivel de actividad muy inferior al que pudieron tener el año pasado por estas fechas”.

Los sindicatos vascos también realizaron ayer sus propias valoraciones de los datos de desempleo. Por ejemplo, CCOO de Euskadi reclamó que el empleo debe ser “el principal reto” del nuevo Gobierno Vasco y de sus presupuestos y realizó un llamamiento a “fortalecer” el diálogo social, “en cuyo seno se deben acordar una ley de empleo y una nueva estrategia vasca de empleo”.

Por su parte, LAB advirtió de que, aunque en los primeros meses de 2020 el empleo que se ha perdido ha sido “el más precario, el temporal”, ahora ya se ha empezado a perder empleo “más estable”, y afirmó que “profundizar en el mercado de trabajo organizado a favor de las élites económicas no ayudará a mejorar las condiciones laborales y de vida de los trabajadores”.