donostia- Los fabricantes de papel de Euskadi afronta el ejercicio de este año con “mucha preocupación” y cree “muy complicado” mantener los niveles de facturación y producción de 2014 tanto por la caída de la demanda como por los efectos que está teniendo la reforma eléctrica, que hace “peligrar” la competitividad de los fabricantes.

El presidente y el gerente de esta asociación empresarial Luis Fernando Ruiz Arrue e Iñaki Ugarte, respectivamente, hicieron ayer balance del año 2014 y de las perspectivas de este ejercicio de un sector que emplea a unas 8.500 personas, lo que supone el 5 % del empleo industrial de la CAV.

Según los fabricantes de papel de Euskadi mantener este año los niveles de facturación y producción de 2014 va a ser muy complicado teniendo en cuenta la evolución registrada en el primer trimestre de este año en donde se mantiene la debilidad de la demanda, sin que haya indicios de que se pueda recuperar a lo largo del año.

En este sentido, según indicó Ruiz Arrue, la producción de papel ha decrecido un 2,6% respecto al año anterior, cuando en Europa ha sido del 0,6%.

Además, los precios de las materias primas y la energía se mantienen en niveles “muy altos” y la pasta de papel “sufre de forma acusada” el fortalecimiento del dólar frente al euro, lo que encarece de forma importante la producción sin poder repercutir este sobrecoste en el precio de venta del papel debido a su baja demanda, según expresaron los responsables del clúster del papel.

En este sentido señalaron que las empresas tienen que seguir “absorbiendo” el impacto de la reforma energética del Gobierno español y “digerir” el precio de la pasta de papel que, según sus datos, ha llegado a superar en más del 30% el precio de mediados de 2014.

En cuanto a los fabricantes de bienes de equipo, los dirigentes del clúster del papel afirmaron que la situación en el mercado interior está “cargada de incertidumbre” ya que, si bien las distintas reformas en máquinas de papel realizadas durante 2014 y principios de 2015 han supuesto una recuperación del negocio, la sostenibilidad del ritmo inversor “no está asegurada”.

Por otra parte, en este subsector, se prevé mantener el negocio en los mercados exteriores, especialmente en América Central y del Sur.

Este comportamiento diferenciado entre las empresas del clúster sobre la base de su actividad se evidenció también en 2014, cuando la facturación global de todos los asociados ascendió a 846 millones, un 3,1 % más.

De hecho, este incremento responde a las cifras de negocio alcanzadas por los fabricantes de bienes de equipo y los transformadores de papel, que han mejorado su facturación un 21 %, mientras que los de pasta y papel han visto, en términos generales, que su facturación se situaba justo por debajo de la lograda en 2013 (-0,1 %).

La producción de pasta y papel de las empresas integradas en el clúster se situó en 2014 los 1,3 millones de toneladas, un 2,7 % más, mientras que las exportaciones superaron los 447 millones, aproximadamente el 53 % de la facturación total, lo que significa una caída del 1,7 %. - Efe