tolosa. Los sindicatos ELA y LAB elevaron la señal de alarma ayer en una comparecencia pública en la que denunciaron la destrucción del tejido productivo de Tolosaldea y convocaron una concentración de protesta para el próximo sábado en la plaza del Triángulo de Tolosa, a partir de las 12.00 horas. Los inminentes cierres anunciados en tres fábricas con décadas de bagaje y actividad en la comarca amenazan a 120 familias. En el disparadero se encuentran las personas que trabajan en Antalis (Kanguros) de Albiztur (39 empleados), Marie Brizard de Zizurkil (48) y Endaki de Aduna (33).
Las plantillas de estas empresas con cuatro décadas de actividad en la comarca están en huelga indefinida después de que sus propietarios, entre ellos dos multinacionales, presentasen recientemente sendos ERE de extinción y anunciasen el cierre de estas plantas productivas. Los trabajadores no tiran la toalla y piden el apoyo de la ciudadanía y de las instituciones para "defender el empleo" y exigir a las compañías que presenten planes de viabilidad que mantengan los puestos de trabajo.
El caso de Perot Zizurkil, por la deslocalización de otra multinacional (Huyck Wangner), está muy reciente. El cierre de esta empresa supuso este mismo año, pese a los esfuerzos de las instituciones y las protestas de la plantilla, la pérdida de 70 puestos de trabajo. Ahora, los anuncios de cierre de estas tres empresas en la misma comarca, Tolosaldea, suponen un golpe de difícil digestión para la zona.
menos paro que hace un año Si se materializan los cierres, se podría echar al traste en cuestión de semanas la positiva evolución de la comarca en lo referente al paro. De hecho, Tolosaldea, con la reducción de 68 personas desempleadas en noviembre consiguió ser la primera comarca de Gipuzkoa que le da la vuelta a las cifras interanuales y se sitúa con menos parados que hace un año. Actualmente, hay 3.232 personas registradas en las listas de Lanbide. Eran 3.273 hace un año.
En una rueda de prensa en la que no admitieron preguntas, responsables comarcales de ELA y LAB y delegados de estos sindicatos en las tres empresas afectadas, denunciaron que "la industria productiva está desapareciendo delante de nuestros ojos". En su opinión, "no se ha hecho ninguna apuesta estratégica para poder desarrollar y fomentar la industria productiva. No se ha trabajado ninguna alternativa y la consecuencia es clara: están dejando morir la industria. Necesitamos una política de empleo eficaz y pelearemos por ello. No vamos a permitir ningún cierre, ningún despido".
Para ello, dijeron, "necesitamos el compromiso de todos: hacemos un llamamiento a la ciudadanía para participar en las movilizaciones y por otra parte a las instituciones, a cada cual en la responsabilidad que le toca, para que adopten las medidas necesarias para potenciar una política industrial que garantice empleo digno en la comarca".