Donostia. Alrededor de 200 trabajadores de Ibermática se concentraron en la mañana de ayer, ante la sede de Kutxabank, en Bilbao, ante la posibilidad de que 238 empleados se queden sin puesto de trabajo el próximo día 15 de marzo, cuando concluya el proceso de integración del sistema informático del banco de las cajas vascas.
La intención de Kutxabank es trasladar la operativa de la banca electrónica y de atención al cliente de Kutxa y Vital, que contaban hasta ahora con el mismo sistema operativo, a una empresa de Bizkaia, que es la que opera con el modelo que tiene BBK.
Los trabajadores, que se encuentran en una huelga de cuatro días que concluye hoy, demandan información sobre el futuro de sus puestos de trabajo, ante el silencio de Kutxabank.