Donostia. El Consejo de Diputados aprobará el próximo martes una nueva regulación laboral en el servicio de bomberos dependiente de la Diputación de Gipuzkoa que supondrá una mayor disponibilidad de estos profesionales durante los tiempos en los que no estén trabajando en los parques de salvamento de la institución foral.
Así, los bomberos de la Diputación volverán a ser requeridos para intervenir fuera de sus horarios de trabajo, después de que la Diputación suprimiera en junio del año pasado el sistema de localización por busca y también el complemento de disponibilidad de un 15% del salario. Desde entonces, el colectivo de bomberos protestó por la nueva situación porque, aseguraban, en la práctica se seguía manteniendo el régimen de disponibilidad pero sin cobrar el plus.
Es por ello que los bomberos han estado negociando durante meses con el departamento de Presidencia una solución que llega ahora con una "imposición unilateral" del ente foral, según criticaron fuentes del colectivo. En el consejo del próximo martes se aprobará una orden foral en la que se dará el visto bueno al nuevo sistema, que supone que los bomberos habrán de estar disponibles, cuando no se encuentren en el parque en su turno de trabajo, por medio de teléfonos móviles. A cambio, la Diputación les aplicará un aumento de salario de unos 3.500 euros anuales.
Los bomberos no están de acuerdo con esa cantidad porque representa un plus menor que el que tenían antes de junio de 2010 con el complemento del 15%, cifrado en alrededor de 4.500 euros anuales. Además, insisten en que los trabajadores del servicio foral contra incendios cobran "bastante menos" que el resto de bomberos de Euskadi, tanto los de las diputaciones de Álava y Bizkaia como los de las ciudades de Donostia y Bilbao.
Otra de las reivindicaciones de los bomberos guipuzcoanos es la contratación de más personal. Actualmente 205 profesionales del salvamento en incendios desarrollan su actividad en los ocho parques de bomberos de la Diputación en el territorio (Azpeitia, Eibar, Irun, Legazpi, Oñati, Ordizia, Tolosa y Zarautz). El año pasado se incorporaron 60 nuevos empleados en el servicio a través de una OPE que surgió de un acuerdo en el año 2006 entre la Diputación y los sindicatos, pero el colectivo cree que la plantilla aún es insuficiente.