Esta central ha considerado que el menor apoyo al paro en Bilbao ha obedecido a un reparto "irregular" de los turnos de trabajo para que los afiliados de las centrales convocantes no trabajaran hoy, por lo que estudia presentar una denuncia por "discriminación sindical y uso fraudulento de datos privados".

Los estibadores de los puertos vascos se reunirán esta tarde en asamblea para decidir si repiten mañana la huelga (en un principio, la convocatoria era para los días 11 al 14 de mayo) en protesta por la modificación de la Ley de Puertos, que comienza mañana su trámite administrativo definitivo en el Parlamento.

El pasado 10 de marzo los sindicatos del sector anunciaron huelgas en marzo y abril en todos los puertos españoles si se aprobaban las enmiendas del proyecto de Ley de Puertos, aunque las movilizaciones se aplazaron después de iniciarse un "proceso negociador" con el PSOE.

Según UGT, en este tiempo de negociación se han logrado algunas mejoras que permiten que "no veamos peligrar nuestros puestos de trabajo".

En un principio, los sindicatos habían estimado que la modificación que originalmente se pretendía realizar de la Ley de Puertos supondría la pérdida de 1.500 puestos de trabajo en el Estado.

En el caso de Euskadi, esa reducción de portuarios llegaría al 40% en Pasajes, donde se realizan más operaciones de carga y descarga de vehículos -operación que dejaría de ser exclusiva de los estibadores-, aunque en Bilbao la afección sería menor, han señalado las mismas fuentes.

Tras el periodo de negociaciones, los sindicatos de la estiba han logrado mantener como propias algunas de las tareas del puerto, por lo que UGT ha afirmado que ahora "no peligran" los puestos de trabajo de los estibadores.

Sin embargo, "la ley no acaba de contentarnos porque lo que hace es desregular más las condiciones laborales y precarizar aún más el empleo, con lo que los futuros trabajadores del puerto trabajarán en condiciones inferiores, con más riesgo para la seguridad e inferiores salarios", han explicado desde UGT.

Por ello, UGT y CCOO han mantenido la convocatoria de huelga (que en Euskadi es apoyada por LAB), de la que se ha desvinculado la Coordinadora Estatal de Trabajadores, el de mayor implantación en los puertos, que espera que se produzcan enmiendas a la ley por parte de los grupos parlametarios del PSOE y el PP durante su tramitación parlamentaria.