Donostia y comercio, dos factores de una ecuación en la que también ocupa un lugar destacado el turismo. Conscientes de que el comercio de proximidad necesita del apoyo tanto de donostiarras como de visitantes, DSS Turismoa ha dado inicio a una serie de acciones para “visibilizar y poner en valor el pequeño comercio local” 

La importancia del comercio en la ciudad se evidencia con números, como ha destacado la concejala de Turismo, Olatz Yarza. En Donostia funcionan 2.357 comercios minoristas, en un sector que da empleo a más de 8.600 personas.

Donostia, ha incidido Yarza, es la capital de la CAV con mayor densidad comercial, 13 comercios por cada 1.000 habitantes, frente a los 12 de Bilbao y los 9 de Gasteiz. Si la lupa se centra en el Centro de San Sebastián, se constata que dicha proporción se eleva hasta los 40 establecimientos por 1.000 habitantes.

¿Y el turismo? Su peso en el PIB es más que importante, ya que alcanza el 14%, con 15.000 puestos de trabajo y generando una riqueza que, ha asegurado Yarza, es “permeable a todo el tejido económico y social de la ciudad”.

"La ciudadanía en el centro"

Así las cosas, Donostia Turismoa ha decidido seguir impulsando acciones que “refuerzan su compromiso con un modelo sostenible, que sitúa a la ciudadanía en el centro y apuesta por la autenticidad del destino”.

Isabel Aguirrezabala, directora de Donostia-San Sebastián Turismoa, ha enumerado estas acciones, entre las que se halla la edición, el pasado julio, de la guía Shopping SS, de la que se han publicado 10.500 ejemplares en cuatro idiomas (euskera, castellano, inglés y francés), que están disponibles en comercios, alojamientos y oficinas de turismo.

74 establecimientos, organizados por sectores, se asoman a las páginas de esta guía.

DSS Turismoa también propone ocho rutas comerciales, accesibles asimismo en Google Maps, que “permiten descubrir negocios singulares y dan visibilidad a la variedad del comercio local”, desde la moda al arte o a la gastronomía.

Suma y sigue. La web de turismo incluye un espacio específico con información de estas ocho rutas, con consejos prácticos que, por ejemplo, ayudan a elegir los reglaos de estas fechas.

Además, ha puesto en marcha una campaña online dirigida, en este caso de forma más especifica, a las personas que visitan la ciudad que, ha subrayado Aguirrezabala, está obteniendo resultados muy positivos.

Las redes sociales, con la incorporación de reels, o la difusión en los medios de spots que dan visibilidad al comercio local, son también acciones que se incluyen en la estrategia de DSS Turismoa.

El pequeño comercio, elemento de identidad

Lo que se pretende, a grandes rasgos, es llegar a visitantes y donostiarras para lograr un equilibrio y para mantener “el pequeño comercio como elemento de la identidad de Donostia”.

Junto a Yarza y Aguirrezabala han estado presentes en la rueda de prensa de hoy representantes del comercio local: Carla Campos, de Noventa Grados; Iñigo Otaegui, de Casa Otaegui; Oihane Pardo, Amarenak; y Paul Lataburu, Arteurparte Gallery.

Todos ellos han coincidido en destacar la importancia que tiene que las y los donostiarras compren en el pequeño comercio.

El peso del turismo en las ventas es más que notable, con diferencias evidentes por barrios, pero el comercio local mira también al público que vive en Donostia y en el conjunto del territorio.

El comercio local se enfrenta, han subrayado, a problemas y retos varios, desde la carestía de los alquileres a las dificultades de garantizar el relevo generacional. 

Internet puede ser, según los sectores o la forma de responder al reto, enemigo o aliado, ya que, por ejemplo, en el mundo del arte, según Lataburu, ha permitido a su galería “abrirse al mundo”.

La importancia que tienen las ventas a los visitantes es un tema que invita” a la reflexión”. Sin dejar esto al lado, uno de los objetivos es atraer a las y los donostiarras al comercio local, un comercio que da personalidad a la cuidad y vida a la calle.

“No existe relevo generacional en los comercios, pero tampoco en la clientela”, ha destacado Pardo.

Las y los comerciantes han puesto el foco en tres ideas tractor: la generación de “comunidad” entre comercios, con los clientes y con las instituciones; el equilibrio en el peso de visitantes y vecinos en las compras; y tomar conciencia del “orgullo de ser donostiarra” también a la hora de apostar por el comercio local.