GuraSOS ha opinado este martes que el proceso judicial iniciado por un presunto delito medioambiental en la incineradora de Zubieta constata que esta instalación "generaba líquidos y lixiviados que no debía", causando "graves problemas medioambientales y de salud a las personas".
"No sabemos cómo va a acabar este proceso judicial, pero a raíz del mismo ya han quedado constatados dos hechos: la incineradora generaba líquidos y lixiviados que no debía generar y a los que había que dar salida", así como que "hay responsabilidades personales en estos hechos", ha afirmado el presidente de GuraSOS, Joxe Mari Izeta.
Izeta ha hecho estas declaraciones en una comparecencia ante la prensa que ha ofrecido en la entrada al Palacio de Justicia de Donostia, donde desde hoy hasta el jueves han comenzado a declarar como investigados 17 directivos y técnicos de las empresas concesionaria y operadora de la incineradora de residuos de Zubieta por un presunto delito medioambiental relacionado con los vertidos a la regata de Arkaitzerreka en julio de 2022.
Según GuraSOS, el auto que acuerda estas declaraciones se basa en un informe pericial y un atestado emitidos por la UCOMA de la Guardia Civil solicitados por el juzgado, a instancias de la Fiscalía de Medio Ambiente de Gipuzkoa.
En ambos documentos el instituto armado alude a "diferentes deficiencias técnicas observadas" en "elementos de la instalación que contienen lixiviados", puestas en marcha sin asegurar "la total estanqueidad".
"Grave riesgo" para el medio ambiente
El informe pericial indica que, como consecuencia de ello, se produjo "un vertido de lixiviados continuado" que procedería de la incineradora y supondría por su composición "un grave riesgo" al medio ambiente.
Izeta ha señalado además que estos lixiviados siguieron produciéndose "al menos hasta finales de 2024, fecha en que fue detectado su transporte a Ecofert, en la localidad navarra de Artajona, así como a Sader, en Bilbao, con todo el escándalo y polvareda interinstitucional que ello generó".
"Desconocemos de momento si a día de hoy se siguen produciendo dichos lixiviados y la salida que se les da", ha explicado el miembro de GuraSOS, quien por otra parte ha recordado que el informe de la Guardia Civil "define el organigrama de intervención en la gestión de la incineradora", en cuya cabeza se encuentra el Consorcio de Gestión de Residuos (GHK), seguido por la empresa concesionaria Ekondakin y por la operadora Ekobal.
Sin embargo, se ha lamentado, "a la hora de confeccionar la lista de imputaciones sólo aparecen directivos de Ekondakin y Ekobal" sin explicar el motivo de la inexistencia entre ellos "de los máximos responsables de GHK, cabeza del organigrama del funcionamiento de la incineradora y entidad que solicitó, por ejemplo, las correspondientes licencias de autorización ambiental del Gobierno Vasco".
A pesar de ello, Izeta se ha mostrado confiado en que las declaraciones que se van a producir hasta el próximo jueves "aportarán alguna luz a la causa investigada". "No vamos a precipitarnos en valoraciones más extensas hasta ver qué dan de si estas diligencias", ha concluido.