En el primer Pleno ordinario presidido por el alcalde Jon Isausti, se ha aprobado de forma definitiva el estudio de detalle para la parcela de Ategorrieta en la que se ubicaba el edificio de Cruz Roja, que cuenta con un grado D de protección en el PEPPUC, Plan Especial de Protección de Patrimonio.

El estudio de detalle que afecta a Villa Alorenea, ha explicado la edil de Urbanismo, Nekane Arzallus, ha pasado dos veces por el Consejo Asesor de Patrimonio del Ayuntamiento, recibiendo luz verde en el encuentro de este foro celebrado el 20 de junio. Inicialmente la propuesta fue evaluada el 14 de marzo, acordándose la inclusión de diversas mejoras.

Según ha detallado Arzallus, el estudio de detalle contó con el voto favorable de seis de los siete integrantes del citado consejo.

El edificio, ha añadido, cuenta con el grado de protección más bajo del PEPPUC, “el que menor valor patrimonial, histórico y cultural” le asigna.

La aprobación definitiva del estudio de detalle ha contado con los votos favorables de PNV, PSE y PP; la abstención de Elkarrekin Donostia y el voto en contra de EH Bildu.

El edil de esta coalición, Ricardo Burutaran, ha demandado mayor información sobre el destino que se dará al edificio. “Nos gustaría saber qué hay detrás”, ha apuntado Burutaran, que ha expresado su preocupación por la posibilidad de que este edificio vaya a acoger una residencia estudiantil que en verano funcione como hotel.

Además, ha lamentado que el proyecto permita la eliminación de una escalera de 1891 e incluya una muro de vidrio de importantes dimensiones.

No habrá hotel

Arzallus ha aprovechado la ocasión para tranquilizar al edil de EH Bildu respecto a los usos del edificio, recordando que el “próximo mes” se llevará a Pleno para su aprobación la modificación del Plan General para la Regulación de los Usos de Hospedaje que, entre las limitaciones, incluye la prohibición de que las residencias de estudiantes funcionen en época vacacional como un establecimiento hotelero.

Esta modificación, aprobada de forma inicial en marzo del pasado año, que entre otros aspectos establece la suspensión general de la otorgación de licencias para implantación de usos de hospedaje en la totalidad de las parcelas urbanísticas, independientemente de su calificación pormenorizada, en los ámbitos señalados de los barrios de Antiguo-Ondarreta, Ategorrieta-Ulia, Centro, Gros e Ibaeta.

En el resto de la ciudad, se plantea una suspensión sólo en aquellas parcelas de tipo residencial.

La suspensión acarreará la imposibilidad de otorgar licencias para la implantación de nuevos establecimientos y usos de hospedaje así como la realización de las obras correspondientes o la ampliación de los preexistentes.

Torre Satrustegi

En el Pleno de hoy el debate en torno a la protección del patrimonio ha tenido otra protagonista: Torre Satrustegi, ya que EH Bildu ha presentado una moción de control en torno a este singular edificio, que no ha prosperado al no contar con el apoyo del Gobierno local.

Ricardo Burutaran ha lamentado que el Gobierno se haya esforzado por hacer "encajar" en las normas, solicitando para ello la necesaria modificación del decreto de protección vigente a al Gobierno Vasco, del proyecto de hotel presentado por Pasiaje de Asturias S.L.. Según ha abundado, argumentar que solo así se podrá garantizar la protección del edificio no es válida, "como se ha visto en el Bellas Artes y el hotel Nobu".

Esta argumentación ha sido rebatida por la concejala de Urbanismo, que ha recordado que el proyecto cuenta con el visto bueno de los organismos que trabajan en la protección del patrimonio a nivel local, foral y de la CAV. "'¿Se puede pedir más garantías?", se ha preguntado Arzallus, que ha asegurado que la transformar Torre Satrustegi en hotel, construyendo en subsuelo y manteniendo su imagen, permite que pueda seguir en pie, ya que en la actualidad presenta un estado de abandono notable.