El Consejo Asesor de Patrimonio del Ayuntamiento de Donostia, que se reunió por primera vez el pasado jueves, se pronunció sobre distintos asuntos que fueron elevados a la nueva mesa que aconsejará al Consistorio en materia de protección de edificaciones. El nuevo órgano no se posicionó sobre una de las irregularidades del hotel Nobu, en concreto, la que hace referencia a la altura de las fachadas de la antigua villa Vista Eder.

Según se acordó en la reunión, el Ayuntamiento encargará nuevas mediciones a un topógrafo especializado, tras las cuales el asunto volverá a la siguiente reunión del Consejo Asesor de Patrimonio para que emita una opinión sobre si la elevación de la altura (hasta ahora se ha barajado que eran 75 centímetros) es o no aceptable desde el punto de vista del Plan Especial del Patrimonio Urbano Construido (Peppuc). La decisión final, sin embargo, recaerá en el Ayuntamiento, que es quien tiene capacidad decisoria.

Por su parte, el proyecto para crear un hotel de 35 habitaciones en Torre Satrustegi, en la falda de Igeldo, podrá dar un paso adelante tras el visto bueno de Consejo Asesor de Patrimonio a que el Ayuntamiento pida al Gobierno Vasco que modifique el decreto que califica el edificio como Bien Cultural con categoría de Monumento. De este modo se podría ejecutar una ampliación semienterrada en el actual jardín delantero del inmueble. 

Torre Satrustegi, en la que se proyecta un hotel

Torre Satrustegi, en la que se proyecta un hotel Ruben Plaza Etxabe

El proyecto para crear un hotel en Torre Satrustegi, que tiene reconocido derechos de ampliación, viene de lejos. En 2017 se planteó crear un añadido en la parte trasera para no alterar el paisaje, pero el nuevo edificio se vería desde algunos puntos, por lo que los promotores plantean ahora crear un espacio semienterrado, que cuenta con el visto bueno de la Diputación.

Cuarteles de Loiola

Otro de los dictámenes emitidos por el Consejo Asesor se refirió a los edificios históricos de los cuarteles de Loiola, que una sentencia obligó a catalogar, aunque fue recurrida por el Ayuntamiento. La mesa sobre patrimonio aconsejó abrir una nueva ficha para las dos construcciones de modo que sus fachadas estén protegidas, aunque pueda haber “un margen de flexibilidad” cuando los edificios tengan una nueva función.

Hay que recordar que, al igual que en Txomin Enea, el suelo del futuro barrio de los cuarteles tendrá que elevarse cerca de tres metros, por lo que la trasera de los edificios podría quedar parcialmente cegada y habría que abrir nuevos accesos.

Pórtico de la estación del Norte

El Consejo Asesor de Patrimonio también se mostró a favor de que el pórtico de la Estación del Norte, que se trasladó unos cuatro metros hacia el río en agosto pasado durante la obra de la estación para acoger el TAV, aún en marcha, se quede en su actual ubicación. Los expertos recuerdan que la columnata de la estación no es la original, ha sido recreada en más de una ocasión y retrasarla de nuevo molestaría a la obra, además de suponer un elevado coste económico.

Traslado del arco de la estación de Renfe el pasado mes de agosto.

Traslado del arco de la estación de Renfe el pasado mes de agosto. Iker Azurmendi

El encuentro de expertos también debatió sobre las fachadas ventiladas – también conocidas como SATE (Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior)– que proliferan en la actualidad y uniformizan los edificios. Tras el consejo de los expertos, el Ayuntamiento promoverá un estudio para poner condiciones a este tipo de fachadas en las zonas del Ensanche Cortázar, el Ensanche Oriental de la Parte Vieja, Gros y Amara. 

También el edificio de la Cruz Roja en Ategorrieta fue objeto de debate, ya que existe un proyecto que contempla la creación de un nuevo pabellón en el terreno. En este caso, el Ayuntamiento iniciará una interlocución con los promotores de cara a salvaguardar el conjunto estético.

Expertos asistentes

La primera reunión del Consejo Asesor de Patrimonio se celebró en el Ayuntamiento y en ella tomaron parte la presidenta y la concejala de Urbanismo, Nekane Arzallus; el director del departamento de Urbanismo, Jon Chávarri; el arquitecto municipal del Peppuc, Haritz Orruño; el doctor arquitecto Javier Puldain; la doctora en Historia Ana Azpiri; el miembro de la Comisión de Patrimonio de la delegación de Gipuzkoa del Colegio Oficial de Arquitectos Vasco-Navarro, Mario Domínguez; la doctora en Historia y profesora de la UPV Berta Echeberria y el presidente de la Asociación de Defensa del Patrimonio y Alberto Fernandez-d’ Arlas. Faltó la representante del Departamento de Cultura de la Diputación, Gabriela Vives.