La asociación de defensa del patrimonio, Ancora, ha manifestado su preocupación por la construcción de un hotel en la torre Satrustegi que, según ha destacado, requiere de una ampliación a ejecutar en la fachada delantera del edificio, obligando a la “excavación casi total de la parcela” para incorporar plataformas de hormigón que, en consecuencia, provocarán la “artificialización de una ladera natural”.

Esta intervención, ha añadido la asociación, "choca con los decretos de Cultura que prohíben tanto la edificación como incluso los movimientos de tierra en el jardín" en una edificación construida en 1883.

Doble grado de protección

Ancora ha recordado que sobre torre Satrustegi existe “un doble grado de protección, derivada de su declaración como Monumento de Euskadi y elemento asociado al Camino de Santiago”, que hace que cualquier añadido deba ocultarse “en la parte trasera del edificio”, limitando la extensión total de las nuevas instalaciones a 1.400 metros cuadrados.

“Es el proyecto el que debe adaptarse a las características del sitio protegido y no al revés”, ha incidido Ancora.

Un hotel con 25 habitaciones

Según ha apuntado la citada asociación el proyecto, que fue validado por el Consejo Asesor del Patrimonio con su voto en contra, contempla la construcción de un hotel "con 25 habitaciones", además de un bar-restaurante, piscina, spa y un aparcamiento para 40 vehículos, lo que, ha lamentado, obligaría a construir "nuevos anexos".

Al parecer de Ancora "es posible compaginar la rentabilidad hotelera con el respeto a los valores paisajísticos-culturales", algo que, a su entender, sí conseguía una propuesta elaborada por los arquitectos Fiark y Espinosa de los Monteros.