El Ayuntamiento de Donostia ha informado este viernes que las cuatro familias que tuvieron que ser desalojadas el jueves de sus hogares por un desprendimiento en la ladera del Paseo de Ulia pudieron regresar a sus casas.

Los técnicos municipales estabilizaron y aseguraron la zona para evitar que nuevos cascotes lleguen hasta las viviendas situadas en los portales 38 y 40.