Donostia. Los centros de empresas Cemei y Belartza, el Polo de Innovación Audiovisual (PIA), así como la nueva residencia de investigadores de Rozanés (Talent House) y el polideportivo Paco Yoldi comienzan estos días a monitorizar los resultados de su consumo energético con el fin de reducirlo.
Los datos obtenidos gracias a esas mediciones del gasto , la producción -en el caso del PIA y Rozanés- y el ahorro energético, así como sus equivalencias económicas, se actualizarán a diario y estarán disponibles para su consulta en la web de la sociedad municipal de Fomento (www.fomentosansebastian.org) a partir de la semana que viene, según informó ayer el concejal de Desarrollo Económico, Enrique Ramos.
El edil avanzó que el Consistorio procurará extender el sistema a otros inmuebles municipales y estimó que este planteamiento se extenderá también en el sector privado durante los próximos años.
Este proyecto se enmarca en el programa Best Energy, cuya finalidad es reducir el consumo energético en un 12% en los edificios públicos. La iniciativa está financiada por el programa CIP-PSP de la Comisión Europea, y participan en ella trece ciudades del Estado y otras de Alemania, Dinamarca, Portugal y la República Checa.
Uno de los objetivos que persigue el Ayuntamiento con la monitorización y la difusión de los datos obtenidos en sus centros es concienciar a la población sobre la necesidad de disminuir el consumo de agua, gas, electricidad y el resto de los recursos energéticos.
Asimismo, pretende fortalecer el tejido económico y empresarial local que se ocupa de desarrollar este tipo de aplicaciones útiles para supervisar los flujos energéticos por parte de la Administración y la ciudadanía. El Ayuntamiento ha puesto en marcha este servicio de base tecnológica en colaboración con las empresas Giroa y Wintel, del clúster local de energías renovables y eficiencia energética.