Donostia. Los bomberos de Donostialdea estrenarán sus nuevas instalaciones situadas cerca de la rotonda de Garbera en Semana Santa, aproximadamente. Esos son los cálculos que manejan teniendo en cuenta que, según afirman desde la concejalía de Obras y Proyectos del Ayuntamiento donostiarra, a principios de febrero (en solo unos días) culminarán las obras del edificio.

De todos modos, llevar todo el equipamiento de la sede actual situada en la calle Easo a la nueva instalación de Garbera llevará unos dos meses, de ahí que esté previsto que el traslado definitivo de los profesionales del cuerpo se produzca a finales de abril.

El nuevo edificio que albergará a los bomberos de Donostialdea comenzó a construirse junto a la rotonda de acceso al centro comercial Garbera en 2008, y las previsiones iniciales marcaban principios de 2010 como fecha para concluir los trabajos. Aunque con meses de retraso, finalmente las obras están prácticamente concluidas, como se puede observar al circular junto al nuevo edificio. Incluso, en los últimos días se ha procedido a colocar la rotulación en el bloque principal.

Fuentes del servicio de bomberos explican que el hecho de que ya se haya colocado la cartelería en el exterior del edificio puede llevar a equívoco y hacer pensar a la ciudadanía que el traslado es inmediato, cuando aún quedan algunos meses de trabajo en el interior de la nueva sede para tener las instalaciones listas.

El nuevo edificio cuenta con 1.661 metros cuadrados destinados espacios para la residencia de los bomberos, tales como talleres, vestuarios, aseos, botiquín, comedor o gimnasio, entre otros; otros 582 metros cuadrados más destinados a la central de comunicaciones, aulas, archivo y despachos; al tiempo que cuenta con 1.309 metros cuadrados de garaje y 2.292 para un patio de prácticas.

A este espacio habría que añadirle otros 750 metros cuadrados que se destinarán a un parking de 40 plazas adaptado para una helisuperficie, zona que se usaría para el aterrizaje de helicópteros, si esto fuera necesario. Esta explanada será la única superficie de estas características en la capital.

actual sede Las nuevas instalaciones poco tendrán que ver con el edificio que ocupan actualmente los bomberos en la calle Easo. Allí se trasladaron en el año 1933, aunque su sede se ha modernizado y adaptado continuamente a lo largo de estos años.

Sin embargo, en 2007 se tomó la decisión de relegar el de Easo y apostar con un nuevo equipamiento, un proyecto que se ha ido materializando gracias al acuerdo suscrito entonces entre el Ayuntamiento de Donostia y la Diputación Foral de Gipuzkoa.

Aunque se instalaron en Easo en 1933, el cuerpo de bomberos donostiarra es más antiguo. Y es que Donostia ha sido una ciudad en la que, tradicionalmente, han abundado los fuegos (no hay que olvidar, por ejemplo, el gran incendio de 1813, que obligo a la reconstrucción de la ciudad y la demolición de las murallas). En 1858, según revela la página web del Consistorio, la Comisión de Ingenieros de Donostia decidió que debía crearse una compañía para la extinción de fuegos formada por 150 hombres. Cada uno de ellos contaba con una placa que se situaba en la fachada de sus hogares y los identificaba como bomberos. De esta manera, al declararse un incendio, los ciudadanos podían acudir a sus hogares para pedir ayuda.

Años después los bomberos se instalaron en la plaza Lasala y, después, también en la plaza de la Bretxa, hasta que en 1933 inauguraron su sede de la calle Easo, que abandonarán en solo unos meses.

el cuerpo En la actualidad 114 profesionales integran el Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamentos de Donostia, que gracias a un acuerdo con la Diputación de Gipuzkoa atiende también las vecinas localidades de de Usurbil, Urnieta, Lasarte-Oria, Hernani, Pasai San Pedro, Pasai Antxo y Astigarraga. En lo que llevamos de 2011, han efectuado un total de 85 salidas, la mayoría motivadas por un fuego o por alguna asistencia.