La selección española de balonmano, con los guipuzcoanos Kauldi Odriozola e Imanol Garciandia, ha caído contra la revelación de los Juegos, Alemania (25-24), en un partido en el que fue a remolque en casi todo momento salvo a falta de 10 minutos. Cuando el marcador lucía 23-24, los de Jordi Ribera han dispuesto de dos balones para llevar la renta a dos. Para terminar de cambiar el escenario del choque, pero no ha marcado en los últimos ocho minutos.

Ese final se ha parecido al comienzo. Hasta que el extremo zumaiarra ha estrenado el casillero, habían transcurrido más de 6 minutos, un tiempo muerto del seleccionador catalán y Alemania iba 3-0 por delante.

Más atinada y, por lo tanto, cómoda la selección de Alfreð Gíslason, respondía a las embestidas españolas, de mayor corazón que acierto: del 3-0 al 3-2 se ha pasado con rapidez al 6-3, que primero Javi Rodríguez ha podido reducir y después Juri Knörr ampliar.

Con un mayor orden, la primera línea ibérica se ha ajustado lo suficiente para mediante Tarrafeta y Casado, y en la búsqueda de Serdio en los seis metros, empatar la contienda por primera vez desde el inicio.

De nuevo, las pérdidas de balón

El nuevo arreón de los alemanes, aderezado con pérdidas de balón y paradas de Andy Wolff, ha llevado el choque al peligroso 10-6 que ha realizado Heymann. Sin perder la cara al encuentro, un acertado último tercio se ha traducido en un parcial de 1-5 a favor de los de Ribera.

Como contra Egipto (12-8 al término de los primeros 30 minutos), las defensas han sido protagonistas de un partido duro en el que los colegiados, los normacedonios Nachevski y Nikolov (protestados por algunos jugadores españoles tras el mismo encuentro de la fase de grupos). 

Aun así, la contienda dejaba a España más aspectos por corregir en ataque que en defensa: la eficacia respecto al marco rival era de un 46% en 26 lanzamientos, mientras que los teutones firmaban el 52% de sus 23 disparos.

Una primera parte en la que el mayor cuajo que tiene la remodelación española a estas alturas ha terminado contemporizando el ímpetu alemán, que ha subido a los vestuarios habiendo probado atacar 7 contra 6 y preguntándose qué más debía hacer, con Andy Wolff al ¡50%! de paradas, para doblegar a los de Jordi Ribera (12-12). Como contra Egipto, sobrevolaba la sensación de que lo mejor al descanso era el resultado.

¿Se repetiría el guion de Egipto?

La reanudación ha dado opción a España a ponerse por primera vez por delante, pero Dani Fernández se ha ‘solidarizado’ con la pérdida de balón previa de Köster.

La reacción de Uscins, que se había ido al vestuario de vacío en sus dos intentos, ha ayudado a los de Gíslason, atascados, a encontrar nuevos argumentos en la sequía. Al punto que tras una parada de Wolff a Garciandia ha dado opción a los germanos de recuperar los tres goles de ventaja. 

Dos oportunas paradas de Pérez de Vargas, cuyo porcentaje acababa de bajar al 27%, ha impulsado a una selección ibérica a la que por momentos le perdía la precipitación ofensiva. De que Aleix Dujshebaev redujera la renta a un tanto a pasar al 19-16 en otro visto y no visto.

Consciente de que precisaba mejores números bajo palos (estadística que se ha cerrado en un 32%), Ribera ha cambiado de guardameta. Ha surtido efecto de salida, aunque adaptada Alemania, a España no le quedaba más que seguir haciendo la goma entre uno y dos goles por debajo en un partido que se volvía a asemejar al de la primera parte: marcado por los parciales.

Empatar la contienda podía suponer abrir un nuevo partido e Imanol Garciandia lo ha hecho en el minuto 46, la primera igualada desde el 13-13, aunque Uscins, ya despierto, y Witzke han vuelto a llevar a los de Gíslason al 22-20.

Imanol Garciandia, con la selección española, en la semifinal de los Juegos Olímpicos contra Alemania Alex Plavevski / Efe

Y ahora, ¿qué? Volver a empezar: Javi Rodríguez desde el pivote, Aleix Gómez y Agustín Casado han volteado el marcador en un minuto, el 49. Johannes Golla ha empatado, pero quien respondía era la selección española: de nuevo Casado, 23-24 con menos de ocho minutos para el final.

El lobo Wolff sale de la guarida

Nadie lo hubiera pensado, pero ese tanto en la antesala del momento decisivo, era el último gol español. Tiempo muerto de Gíslason que Alemania no traduce en gol en la jugada posterior y balón para España. Los dos tantos de ventaja, en juego. Un momento para los grandes y el portero alemán, Andy Wolff, lo es. A diferencia del portero egipcio, que complicó a España mucho más la primera parte que la segunda, el teutón ha aparecido en la primera... y en la segunda.

El Kiel alemán, tras naufragar esta temporada por tener dos buenos porteros pero ninguno de talla mundial, acaba de abonar 600.000 euros al Kielce polaco para incorporarlo de inmediato. El año que viene sumará a Pérez de Vargas, que había vuelto a la portería española y volvía a parar.

Como ya demostró en los momentos decisivos del Europeo de enero, Wolff ha resuelto la semifinal con dos paradas consecutivas a Javi Rodríguez. Dos balones que podían haber puesto a España dos goles arriba, porque entre una y otra jugada, Knörr, que se redimiría con el 25-24, ha perdido el balón.

Por el bronce

Quien no estaba perdido ha sido el portero alemán, que ha sacado otro balón al pequeño de los Dujshebaev y otro a Abel Serdio desde la línea de los seis metros para enterrar en la recta final las opciones del equipo de Jordi Ribera. 

La selección española, en pleno proceso de renovación, jugaba por quinta vez en su historia para entrar en la final olímpica. Por quinta vez peleará el domingo por el bronce contra el perdedor del Dinamarca-Eslovenia. En las cuatro ocasiones anteriores consiguió reponerse y subir al podio.

Ficha técnica

25 - Alemania (12+13). Späth (P), Wolff (P), Golla (4), Witzke (1), Heymann (2), Knorr (4), Koester (3), Uscins (6), Haefner (1), Dahmke, Mertens (1), Steiner (3), Grgic y Kohlbacher.

24 - España (12+12). Pérez de Vargas (P), Corrales (P); Álex Dujshebaev (1), Tarrafeta (4), Maqueda, Garciandia (2), Casado (4), Dani Dujshebaev, Aleix Gómez (3), Odriozola (2), Sánchez-Migallón, Dani Fernández (5), Serdio (2) y Javi Rodríguez (1).

Parciales. 2-0, 5-3, 7-6, 10-7, 11-8, 12-12 --descanso--, 15-13, 18-16, 20-19, 22-22, 23-24, 25-24.

Árbitros. Nachevski y Nikolov (Macedonia del Norte). Excluyeron dos minutos a Golla por parte de Alemania. Y a Maqueda en España.

Pabellón. Estadio Pierre-Mauroy de Lille ante 27.000 espectadores.