La piragüista pasaitarra Begoña Lazkano debutará en los próximos Juegos Olímpicos. Consiguió la clasificación olímpica gracias a su papel en la Copa del Mundo de Szeged, Hungría, y se quedó en "shock" cuando lo consiguió. No poder clasificarse para Pekín'2020 le supuso un "palo" que le hizo plantearse "muchas cosas". Pero gracias al apoyo de su familia ha podido levantarse de los malos momentos. Lazkano, que ya ha conseguido medallas de plata y bronce en campeonatos internacionales, se muestra ilusionada y con ganas de dar lo mejor de sí misma en Francia.
Ya falta menos para los Juegos Olímpicos, ¿se van notando los nervios? ¿Cómo se afronta?
De momento, no tengo nervios. Desde la clasificación para los Juegos Olímpicos han sido días de asimilar lo que acababa de pasar. Ahora lo que más siento es ilusión y muchas ganas de darlo todo. Quiero sacar mi mejor versión en París. Supongo que cuando se acerque más la fecha empezaré a sentir la adrenalina que te da la competición.
Consiguió la clasificación para los JJOO por su papel en la Copa del Mundo de Szeged, Hungría. ¿Qué sintió cuando lo consiguió?
La plaza para el K1 le llega a España a través de una compañera del equipo nacional, Isabel Contreras, que el año pasado compitió en el Mundial. La plaza para la clasificación corrió hasta la doce. Sabíamos que este año tenía que ganar otra persona que no fuera ella, que era la titular en España. Ella tenía una doble oportunidad. Si ella ganaba en España, se clasificaba. Si ganaba otra persona, iba a la Copa del Mundo a enfrentarse a Isabel Contreras otra vez. Si le volvía a ganar, la plaza era suya. Entonces, yo me vi en la Copa del Mundo que tenía que ganar a Isa. Cuando cruzo la línea de meta y miro para un lado y veo que llego antes que ella, el momento fue como “wow”. Me quedé entre sorprendida, contenta… Le miraba a mi entrenador, Dani, y le hacía gestos para que me lo confirmase, aunque yo ya lo hubiera visto.
Estuve todo el año visualizando ese momento. Pensando en que quería ganar en España para conseguir la plaza. Cuando vi que era una realidad me quedé como en “shock”, sorprendida. Pero cuando pasaron los segundos eso se convirtió en alegría. Estuve muy feliz de haberlo vivido así. Mis padres y mi pareja estaban por allí también, por lo que fue muy bonito poder compartirlo con ellos nada más salir del agua. Estuvo muy bien.
Imagino que el camino no habrá sido fácil. ¿Se ha encontrado con muchos obstáculos?
“¿Me estaré dando contra un muro que no voy a poder tirar? ¿Lo intento una vez más?”
Sí. Al final tengo 30 años y llevo 12 desde que entré al equipo senior (con 18 años). Hay algunos momentos buenísimos y otros malos. Hay momentos en los que los resultados no acompañan. Siempre trabajas y das tu máximo pero en el deporte ya se sabe que no todo depende de ti. A veces, también necesitas un poco de suerte. Hemos tenido también cambios de lugar de entrenamiento, y al final te tienes que adaptar. Ha habido momentos muy malos. Momentos en los que he pensado en dejarlo. Al final yo soy una persona que no tiene problema con insistir y volver a insistir. Pero cuando ves que, a veces, hay cosas que no solo dependen de ti terminas con sensación de agotamiento. Piensas “¿me estaré dando contra un muro que no voy a poder tirar?” “¿Lo intento una vez más?”. Tokio 2020, al no poder clasificarme, fue un palo. Te planteas muchas cosas. Al final esto va un poco por ciclos. Después vinimos a Pontevedra y es donde más a gusto me he encontrado. Ya es la tercera temporada, y estoy en un buen momento. Pero, sin duda, ha habido momentos muy malos. He tenido la suerte de que mis padres me apoyan desde siempre de forma incondicional. Vienen a verme donde esté. Con ese ánimo he podido levantarme de los malos momentos.
¿Cómo fueron sus inicios?
Yo empecé como muchos niños. Fue con 10 años. Al principio era un juego. En verano solía veranear en Galicia con mis abuelos y mis primas. Hubo un verano que mi abuela enfermó y me quedé en Pasaia. Entonces, me apunté con mi mejor amigo, Jon, a unos cursillos de piragüismo y nos encantó. Me pareció un deporte diferente en el que te lo pasabas bien y jugabas con los demás niños. Después, el entrenador del club nos dijo a ver si queríamos quedarnos para probar a entrenar una temporada de alevines. Nos dijo que si aguantábamos el primer invierno, que es un sitio donde llueve, nos íbamos a quedar. Nos apuntamos y aguantamos. La verdad es que cuando haces amigos la lluvia y el sol te da lo mismo.
Después, empecé a competir primero en Gipuzkoa, después en Euskadi. Y, la verdad, es que tenía buenos resultados. Soy una persona muy competitiva y me gustaba siempre intentar ganar. A la hora de entrenar no me lo tomaba con demasiada seriedad cuando tenía 10 años pero, al competir, me salía una forma de ser que no estaba a diario. Siempre me gustaba ganar, intentar hacerlo bien compitiendo.
En categoría junior, cuando ya puedes empezar a competir en competiciones internacionales, me clasifiqué para el Europeo y para el Mundial junior. Ahí, la verdad es que nos fue muy bien. Sacamos bronce en el Mundial. Cuando compites fuera y ves que los resultados acompañan, hace que tengas más ganas de continuar con ese deporte. Además, te lo pasas bien, conoces a gente, haces concentraciones en otros lugares…
Entonces, pasó de ser un pasatiempo y un juego a algo más profesionalizado. Al principio, si tenía un examen importante, faltaba algún día a entrenar. Yo me lo tomaba en serio, pero siempre priorizando los estudios. Cuando te llaman para el equipo nacional para vivir concentrada de forma permanente, ya vas viendo que esto es otro tema. Los entrenamientos pasan a ser una prioridad en el día. En aquel momento estudiaba Periodismo, pero era secundario. Al final, cuando el deporte pasa a ser el eje central del día, y empiezas a entrenar con el equipo nacional, el cansancio de los entrenamientos es mucho mayor. Por lo tanto, cada vez vas exigiéndote más. El proceso es lento pero vas dando pasos para asentarte en la categoría senior y te vas exigiendo más. Hasta que un día te ves soñando con unos JJOO y viéndolo como una posibilidad real. Porque soñar siempre puedes hacerlo, pero tener el nivel real para intentar optar a ello, es más complicado. Entonces hay que trabajar para intentarlo al menos, porque aunque lo intentes, nada te asegura de que lo vayas a lograr.
Ha estudiado Periodismo y Filología inglesa. ¿Cómo se puede compaginar los estudios con el deporte de élite?
Es cuestión de organización. No soy la persona que mejor se organiza pero, si tienes voluntad, aunque tardes un poco más que la gente que no hace deporte a este nivel, puedes hacerlo. Al final, las competiciones empiezan en mayo y, a lo mejor, ni siquiera estás físicamente para un examen y tienes que cambiar de fecha o no te da tiempo para estudiar todo. Es cuestión de organización y de tener claro lo que quieres. Evidentemente, tienes que sacar muchos ratos en los que estudiar. Si quieres algo y pones esfuerzo e interés, acaba saliendo. He tardado más de cuatro años en terminar Periodismo, pero lo conseguí. Empecé en modalidad presencial, pero cada cierto tiempo me cambiaban el lugar de residencia. Tuve que cambiarme a modalidad semipresencial. También aprendes a organizarte y a distribuir tu tiempo. Puedes sacar lecturas bastantes positivas de ello. Con esfuerzo se puede conseguir.
Mejor acompañada
¿Cómo de importante es el apoyo de su familia, amigos, entrenador, del club… durante este proceso?
Lo considero algo básico. Es un deporte muy duro. Tenemos que entrenar prácticamente a diario. Da igual las condiciones climatológicas que haga, que tienes que salir al agua igualmente. Hay muchos momentos en los que hay bajones. Tener un buen soporte, entorno, una familia que está ahí para apoyarte y animarte, unos amigos que te entienden… es muy importante. Yo, desde que cumplí los 18 años, he ido muy poco a casa, y soy una persona muy de mis amigos y de mi familia. Pero, al final, no tengo el mismo tiempo que tiene otra persona, ni tampoco puedo hacer los planes que hacen mis amigos. Si mis amigos hacen planes el mes de junio, yo rara vez podré si la temporada me sale bien. Pero ellos lo entienden y me apoyan. Saben que estoy haciendo un sacrificio y estoy luchando por un sueño y que no puedo pasar el tiempo que me gustaría con ellos. Pero eso no les aleja de mi, ni mucho menos. Ellos siempre me apoyan y me siento muy arropada por mi entorno. Para mi es una suerte. Soy una persona muy de casa. Soy muy de Pasaia, de Donostia. Necesito esa parte y es muy importante ese apoyo.
"Basque Team o Kirolgi me han ayudado desde que entré en categoría Senior y no tengo las palabras suficientes para agradecerles"
También siento el apoyo de instituciones como Basque Team o Kirolgi. Me han ayudado desde que entré en categoría senior y no tengo palabras suficientes para agradecerles. Porque es un apoyo muy importante. En los mejores o peores momentos, ellos siempre me han apoyado.
¿Le acompañarán la familia o amigos a los JJOO?
Ya están mirando las opciones para ir. Yo me he clasificado relativamente tarde y los precios de las entradas y el alojamiento están bastante altos. Mi gente va a intentar ir a ver los Juegos. Tenemos la suerte de que son en París y que, desde el País Vasco, tenemos fácil movernos. No es barato ir, pero no es inaccesible. Entonces, mucha gente de mi entorno va a ir a animarme.
Preparación mental y psicológica
¿Cómo se está preparando de cara a estos Juegos? ¿Tiene algún entrenamiento especial o es parecido a prepararse para otras competiciones?
Siempre hay una competición más importante que otras. Normalmente, suele ser el Mundial. El año de los Juegos Olímpicos, son los juegos. Entonces, nos preparamos como para la competición más importante del año, en este caso los JJOO. Va a ser la misma planificación. Al final, nuestro año tampoco tiene tantas pruebas internacionales. Vengo de hacer una Copa del Mundo y ahora vamos a los JJOO. Intentaremos hacer algunos picos de forma, siendo el pico más alto de cara a los JJOO. En ese aspecto, no cambiamos nada.
¿Cómo se maneja la presión de competir en un evento tan importante?
Para mí es algo nuevo. No sé a qué me enfrento a nivel mental. Sí que es cierto que yo llevo ya tiempo trabajando con psicólogos y tenemos un plan para ir día a día preparándome para las competiciones. Pero sabiendo que los JJOO son una competición muy especial, me preparo para sacar mi mejor versión en el momento en el que toca sacarla. Pero me preparo como me prepararía para un Mundial. Lo que me encuentre va a ser nuevo y otra experiencia. Tengo esa incertidumbre pero pienso que también es bueno, porque todo van a ser estímulos positivos. Es muy difícil llegar a unos Juegos y lo veo más como una oportunidad que algo que me genere presión.
Juegos Olímpicos
¿Qué significa para usted participar en los JJOO por primera vez?
Lo veo como una oportunidad de demostrar todo lo que he trabajado no solo esta temporada, sino durante muchas. El trabajo siempre está ahí, pero el deporte no siempre te premia con resultados. Hay mucha gente que entrena y se prepara. Los JJOO son una competición muy especial que se celebran cada cuatro años. Intenté clasificarme para Tokio 2020, y no lo conseguí. Y no vuelves a tener otra oportunidad hasta que pasan cuatro años. Veo estos Juegos como una oportunidad y como una recompensa a todo el trabajo que he hecho. Hay muchos deportistas que tienen nivel para poder ir a los JJOO y, por diversas circunstancias, no logran clasificarse. Lo veo como una oportunidad y una suerte de que mi trabajo se haya visto recompensado.
Fue medalla de plata en Polonia en 2021 y bronce en Alemania en 2022. En estos JJOO, ¿va a por la tercera medalla?
"No me pongo objetivos demasiado concretos porque nunca he competido en un evento de esta envergadura. Pienso en dar mi mejor versión"
Eso sería un sueño hecho realidad. Pero no pienso en ello. No me pongo objetivos demasiado concretos porque nunca he competido en un evento de esta envergadura. Pienso en dar mi mejor versión. El día en el que me clasifiqué para los juegos, en mayo, hice mi mejor marca personal. Y lo que pienso es en mejorar mi propio tiempo. Que mi récord sea el día de los Juegos Olímpicos, en el día más importante. Si con mi mejor versión, consiguiera un puesto número 15, 12 o medalla, sería precioso. Pero, de momento, lo que mi cabeza piensa es en intentar mejorar cada día para llegar allí en el mejor momento tanto físico como mental.
La villa olímpica, en la que convivís todos los deportistas, dicen que es una pasada. ¿Cómo se la imagina?
Me imagino que tiene que ser algo espectacular. Convivir con los mejores deportistas del mundo tiene que ser algo único. En el piragüismo tenemos muchos ídolos, como Saúl Craviotto, María Teresa Portela… tiene que ser algo impresionante. Me lo imagino como un lugar en el que están los mejores deportistas del mundo y eso ya me parece lo máximo.
¿Le gustaría ver o saludar a algún/a deportista en específico?
Tengo muchos ídolos, no sabría decirte uno en concreto. Pero seguro que si veo a cualquiera de los que más me gustan, me gustaría hacerme una foto con ellos.
¿Quiénes son sus referentes?
En España tenemos un montón de cracks. En mi equipo está María Teresa Portela, que va a ir a sus séptimos Juegos Olímpicos. Imagínate lo que es entrenar con alguien que va a ir a sus séptimos Juegos. Yo voy a ir a mis primeros y ya me parece una pasada lo que estoy viviendo. Tener a una referencia como Teresa es una pasada y puedes aprender muchísimo y es una suerte.
Valores, visibilidad y consejos
¿Qué valores le ha dado este deporte?
Disciplina, constancia… Nosotros competimos a partir de marzo hasta agosto y hay meses en lo que “simplemente” entrenas y eso a veces no es lo más agradable. Hay que entrenar a dos grados, con un frío impresionante a las doce de la mañana, y hay días que no apetece demasiado. Además, con las competiciones a varios meses vista piensas en que ni siquiera estás aún cerca. A veces, exigirte el máximo puede ser complicado. Pero sabes que lo vas a agradecer y eso te da una disciplina, constancia y ser consciente de lo que importa el esfuerzo que haces. Aunque después el resultado no te agrade del todo, el esfuerzo lo has puesto y tienes que entender de que poner el esfuerzo por sí solo ya tiene mucho mérito. Es poner empeño en lo que vayas a hacer en tu vida. Lo que vayas a hacer, hacerlo con ganas y como mejor puedas, porque a largo plazo vas a estar a gusto.
¿Cree que el piragüismo merece más visibilidad?
No soy objetiva porque a mi el piragüismo me encanta. Me parece un deporte muy visual. Es un deporte que bien enfocado y mostrándolo de manera atractiva puede atraer a la gente. Cada vez se consume más. En nuestro país es evidente que la cultura del fútbol tiene mucho peso, pero también lo entiendo, porque cada uno consume lo que quiere. Pero sí que es cierto que, si presentas otros deportes de manera más atractiva, puedes conseguir más visibilidad. Creo que el piragüismo lo merece porque me parece un deporte bonito.
¿Qué consejo le daría a los jóvenes que quieren dedicarse al piragüismo?
A los más jóvenes les diría que vayan paso a paso y que se centren en disfrutar. En apreciar en las cosas que da el día a día. Pasarlo bien, el compañerismo, divertirte cuando estás haciendo tu deporte, en ir viendo pequeñas mejoras… Pero, sobre todo cuando eres pequeño, no obsesionarte con los resultados e ir paso a paso, pasándolo bien y disfrutando. De mis mejores amigos, muchos los he hecho en el club en los primeros años. Está muy bien llegar a un gran nivel y competir unos Juegos Olímpicos, pero lo que me va a quedar real mente en mi vida es la amistad que he hecho con gente del club , las experiencias que he vivido… son las cosas que recuerdas más y con más cariño. Que hay que disfrutar de todos esos momentos, que son los más importantes.
La agenda de Begoña Lazkano en París
- Nacimiento. 14-1- 1994, Pasaia.
- Modalidad deportiva. Piragüismo. Pista (k-1 500).
- Clasificación. Tras varios intentos sin éxito de participar en unos Juegos en diferentes modalidades, Lazkano se clasificó tras ser la mejor palista estatal en su disciplina en la Copa del Mundo de Szeged del pasado mes de mayo.
- Su agenda en París. La prueba de k-1 500 comenzará el 6 de agosto con la celebración de la primera serie y de los cuartos de final, y el 10 de agosto se decidirán las semifinales y la final. El escenario de la competición será el estadio náutico de Vaires-sur-Marne