Iker Vicente volvió a demostrar que es el mejor aizkolari de Euskal Herria. El navarro, de 24 años, conquistó en el Bilbao Arena su tercera txapela consecutiva dominando la final de principio a fin. Vicente se adjudicó el Sherpa.ai Aizkolari Txapelketa Nagusia tras cortar los doce troncos en 39 minutos y 37 segundos, superando en dos minutos y veinte segundos a Mikel Larrañaga, que repitió la segunda plaza obtenida en las dos ediciones anteriores.

El azpeitiarra se perfilaba como el principal aspirante a destronar al campeón. Larrañaga ya había vencido a Vicente en la Urrezko Kopa del pasado mes de agosto, mejoró el tiempo del navarro en la eliminatoria de esta competición y, además, el pasado fin de semana se mostró intratable en el Campeonato de Gipuzkoa. Él mismo reconoció que su objetivo era lograr la txapela, pero ayer no tuvo su día. Lejos de Vicente, acabó compitiendo con Eneko Otaño por la segunda posición. El de Beizama, finalmente, repitió la tercera plaza lograda el pasado año, a tres minutos y 37 segundos del navarro.

El vizcaino Aitzol Atutxa fue cuarto por delante del azkoitiarra Julen Alberdi, y el zizurkildarra Jon Irazu, muy rezagado, cerró la clasificación.

Los aizkolaris tuvieron que hacer frente, por este orden, a dos kanaerdikos, dos troncos de 60 pulgadas, cuatro oinbikos, otros dos troncos de 60 pulgadas y dos últimos kanaerdikos. Vicente fue siempre el mejor clasificado de la final y pudo gestionar con comodidad su ritmo en los últimos troncos. El navarro acabó el primer kanaerdiko con ocho segundos de ventaja sobre Aitzol Atutxa y 17 sobre Larrañaga, y a partir de ahí no vio peligrar nunca su primer puesto. Mientras Vicente se mantuvo siempre en cabeza, las clasificaciones de los demás aizkolaris sufrieron bastantes variaciones durante la final.

Larrañaga se encontró con un nudo en sus primeros troncos y tuvo que esforzarse para no descolgarse de sus demás rivales, y acabó consolidándose en la segunda posición sobre los oinbikos.

Irazu se situó como colista a partir de la segunda madera. Otaño, por su parte, remontó posiciones frente a Atutxa y Alberdi de forma significativa sobre los cuatro oinbikos, en la parte más dura del trabajo. El de Beizama, de menos a más, se situó a tan solo 23 segundos de Larrañaga antes del penúltimo kanaerdiko. El azpeitiarra no quiso confiarse, trató de asegurar su posición y acabó la prueba exhausto, pero con más de un minuto de ventaja con respecto a Otaño.

Las finales fueron televisadas por Gol para todo el estado y un total de catorce países. Entre las novedades de la retransmisión estuvo la identificación con diferentes colores de cada tipo de tronco. La principal novedad del evento, no obstante, estuvo en el regreso del público. El Bilbao Arena acogió a cerca de tres mil espectadores y los aizkolaris pudieron volver a sentir los ánimos y los aplausos de sus seguidores.

Gisasola, primera campeona

La victoria en la primera edición femenina del Sherpa.ai Aizkolari Txapelketa Nagusia fue para Karmele Gisasola, Zelai III. La vizcaina se puso por delante en el segundo de los cuatro troncos y no abandonó la primera posicion hasta completar la prueba, en once minutos y 48 segundos.

Uxue Ansorregi fue segunda con un tiempo de 13:03. La aizkolari de Mendaro, que fue la última de las tres finalistas en el primer tronco, no abandonó la segunda posición desde el segundo corte de la competición.

La navarra Maika Ariztegi fue la primera en completar el corte del primer tronco, pero no tardó en quedarse rezagada y caer hasta la tercera posición.