La temporada de Lucas Eguibar llegó a su fin el pasado sábado, mucho antes de lo previsto. El rider donostiarra estaba disputando la final de consolación en la prueba de la Copa del Mundo que acogía la estación de Cortina D’Ampezzo, en Italia, cuando una caída derivó en la rotura del tendón de Aquiles de su pierna izquierda, y en la intervención quirúrgica posterior.
Eguibar reconoció estar “chafado” por esta lesión, “pero son cosas del deporte. Me lo he tomado bien y quiero tomármelo bien. Es lo que me depara el futuro y quiero afrontarlo con ilusión y con muchas ganas”.
Al donostiarra le espera un período de recuperación de unos seis meses, pero mira al futuro “con ganas”:“Es lo que me quedo de este año. Intentaré aprender de las cosas que me han pasado, y con muchas ganas de cara al Campeonato del Mundo del año que viene, sobre todo”. El snowboarder ya fue campeón mundial en 2021, y tratará de volver a conseguirlo en la estación suiza de Sankt Moritz, donde este año finalizó en la séptima posición.
“Con seis meses me da justo para empezar la pretemporada” del próximo curso. “Quiero verme ahí el año que viene como sea”, aseguró.
Eguibar se lesionó cuando trataba de ganar la final de consolación para hacerse con la quinta plaza final: “Venía haciendo la estrategia que quería, quería ganar esa ronda y quería quedar quinto, y es lo que hay”
Caída y lesión en Italia
Eguibar compareció ayer ante los medios de comunicación en Donostia junto a la coordinadora de la Fundación Basque Team, Olatz Legarza, para explicar el estado de su lesión.
El donostiarra rememoraba así el momento en el que se rompió el tendón de Aquiles:“He visto muchas veces el vídeo y no encuentro realmente dónde pasó. Yo iba muy rápido y no me acuerdo. Solo recuerdo haberme caído y que cuando me levanté ya me dolía mucho”. “Recuerdo que me estaban preguntando a ver qué era y yo dije Aquiles, en todo momento. Nunca había tenido una lesión de Aquiles, pero cuando me intenté levantar no podía mover el tobillo, me volví a caer al suelo y me reacción fue quitarme la bota, vinieron a ayudarme y me quitaron la bota. Era un dolor bastante soportable”.
En un principio, Eguibar acudió al centro médico de la estación, donde le practicaron una ecografía que no detectó ninguna lesión:“Le avisé a mi entrenador de que no me fiaba mucho y de que quería ir a un hospital al día siguiente”.
El donostiarra llegó a tener esperanzas de que fuera una lesión menos grave:“Me encontré un poco mejor y pensé Igual la semana que viene puedo estar compitiendo en Austria, pero al llegar a Innsbruck, la doctora que me vio ya dijo en diez segundos que el Aquiles estaba roto”. Eguibar se sometió a una intervención quirúrgica en la misma localidad austriaca:“La operación ha salido perfecta. Fuimos especialmente a una clínica que sabíamos que era muy buena”.
La recuperación
Eguibar explicó que tras la operación le pusieron una bota que deberá llevar durante dos meses:“Intentaré ir al gimnasio y moverme todo lo que pueda, pero sin contar con este pie. Hay que ir muy poco a poco. Los tendones van recuperándose muy lentamente, y me han dicho que tenga paciencia, porque necesitaré unos seis meses hasta que pueda volver al 100%. De todos modos, iremos viendo. Si a los cuatro o cinco meses me veo bien intentaré ir a Madrid o probaré a ponerme la tabla en algún sitio”.
El donostiarra, en principio, planea realizar su recuperación en Donostia, junto a “su equipo” del gimnasio Equilibrium.
Eguibar, que se mostró optimista y sonriente, aseguró en varias ocasiones sentir “ilusión” ante el proceso que le espera:“Es lo que me ha tocado. No solo en el deporte, sino en la vida, pasan estas cosas, y hay que pasarlas, y ya está. Estoy ya bastante dentro del papel que me toca”. “Quiero estudiar lo que ha pasado este año en todas las carreras, quiero seguir avanzando. Por la pierna no voy a poder hacer muchas cosas, pero otras muchas cosas sí”. “Voy a estar estudiando y entrenando otras cosas para volver más fuerte”. “He pasado página y estoy ilusionado, en el sentido de que quiero aprovechar todo este tiempo que tengo para fortalecer mis otras facetas y para llegar con otras armas al año que viene”.
Hace unos años, el campeón del mundo de 2021 también se vio afectado por una lesión en la espalda:“Solo me salté un par de carreras. Me podía mover con mucho dolor, con infiltraciones, y pude seguir compitiendo. Con esto no puedo hacer nada. Necesito ayuda para meterme en la ducha, para salir...La espalda fue muy dura, porque hubo momentos en los que pensaba que no iba a poder seguir compitiendo, pero esto es totalmente diferente”.
Eguibar mira al futuro “con ganas” de volver a competir y no piensa en la retirada:“¿Decir adiós? Todavía no, soy joven todavía”.
