Donostia - Se acabó el hacer cábalas, pronósticos y probar combinaciones. La liguilla de cuartos más reñida que se recuerda llegó a su fin el lunes pasado con el intrascendente Bengoetxea-Larunbe contra Jaka-Zabaleta. Un punto final descafeinado para un Parejas que ha mantenido la emoción hasta la última jornada y que deja a todos felices.
Todos felices porque las empresas tendrán representación al 50% en las semifinales. Irribarria-Rezusta y Elezkano-Zabaleta, de Aspe, mientras que Asegarce presenta a Olaizola-Untoria y Bengoetxea-Larunbe. Igualdad de efectivos, pero no de favoritos. Los zurdos guipuzcoanos, con doce triunfos de catorce posibles en los cuartos de final, son los grandes candidatos a calzarse la txapela. “Hay una pareja que anda por encima del resto”, reconoce Rubén Beloki, técnico de Asegarce.
En la promotora bilbaina están satisfechos de colar dos parejas en las semifinales, ya que tuvieron un inicio de torneo irregular. “La lesión de Artola nos hizo daño y Aimar (Olaizola) también tuvo problemillas”, asevera Beloki, que cree que la igualdad que se ha visto en el torneo es “muy positiva para el aficionado”.
En Eibar también sonríen. Se congratulan de la emoción vivida en cuartos y, aunque casi todos cuelgan la vitola de favoritos a Irribarria-Rezusta, desde Aspe se toman los halagos con moderación y ven en Olaizola II un rival temible. “Aimar ha ido de menos a más. Ahora, él y Untoria van a ser muy peligrosos”, considera Inaxio Errandonea, director comercial de la empresa.
El expelotari reconoce que los zurdos de Arama y Bergara han hecho “un gran campeonato” pero que la igualdad del resto ha hecho las delicias de los aficionados. “El público ha respondido, tanto en los pueblos como en los frontones industriales”, concluye.
en el astelena La pareja, en principio, favorita, Irribarria-Rezusta, comenzará su camino en las semifinales en el frontón Astelena de Eibar el próximo domingo ante Elezkano II-Zabaleta. Además, los guipuzcoanos jugarán en el Atano III donostiarra en la segunda jornada. - I.M.
