Donostia. El zaguero de Berriz Ibai Zabala es un tipo templado y cabal. Sin embargo, como cuenta él, en las últimas semanas se ha visto acosado por una tensión dañina. No obstante, el camino en su primer Parejas de titular ha sido bueno a todas luces y él se queda "contento". Tienen una bala en la recámara y el domingo saldrán a por todas por si la fortuna sonríe.
El domingo se miden a Oinatz y Beroiz en un partido trascendente. Tienen que salir a por todas.
Sin duda. Cuando en la liguilla estábamos clasificados, salíamos a tope, así que ahora que estamos casi fuera, también. Pase lo que pase el sábado entre Pablo e Irujo saldremos a morder, aunque si gana Irujo, tendremos en nuestra mano la llave de la final.
A pesar de todo, un 22-10 no parece tampoco tan descabellado.
Igual no lo parece, pero contra una pareja como Bengoetxea-Beroiz, que han mostrado una solidez enorme, que no regalan nada y son fuertes, lo tenemos casi imposible. Pero no solo es eso: cuenta el resultado, quién pierda el día antes, a Pablo también le podríamos meter nosotros... Hay muchas variables, por lo que lo mejor es salir a tope y si te ganan, te ganan.
¿Es mejor ver el envite del sábado o desconectar?
No, no. Mejor verlo. Yo considero que estamos fuera y no tengo demasiada tensión. Sí que los dos anteriores los he vivido con mucha presión. El primer partido fue un desastre y tras el segundo la semana ha sido muy intensa: fue un partido de muchos nervios. Jugué bien hasta el 14 y ellos jugaron una barbaridad. Después de esas dos semanas, esta hay que tomarla con más tranquilidad y un poco como cierre de campeonato. Para clasificarnos, tienen que pasar muchas cosas, pero pueden pasar.
Momento de disfrutar, entonces.
Exacto. En semifinales, con toda la presión que hemos vivido, no he estado a gusto.
Dice que ha notado mucha presión.
La primera semana no tanta, pero el partido salió como salió y te tienes que poner más alerta. Te pones más tenso, pero con nerviosismo. Después de hacer un campeonato muy bueno, llegas a semifinales y haces un partido así y pierdes mucha confianza. El sábado estuvimos bien, pero Berasaluze y Albisu jugaron una barbaridad. Ahora, tocan menos nervios, pero saldremos a tope porque hay cuatro compañeros de empresa para los que podemos ser jueces.
¿Qué le parece el Atano III?
Es un frontón muy bonito. La verdad es que no le veo ningún pero, aunque no se use mucho en las programaciones. Es noble y en el suelo anda bien la pelota.
¿Cuál es su valoración personal de su primer 'Parejas' como zaguero titular de Asegarce?
Mirándolo fríamente, yo creo que he hecho un buen campeonato. Hay que tener en cuenta todo lo que he tenido que trabajar los últimos meses: desde la operación de la mano en febrero del año pasado, tras la cual pude remontar el vuelo, que la empresa confíe y hasta llegar a jugar un campeonato de titular. Y hacerlo con Aimar es una gozada, pero también mete mucha presión, que igual he acusado más en semifinales; porque cuando ganas, todos miran a Olaizola II, pero cuando pierdes, todos me miran a mí. También hay que saber llevar eso. Yo estoy muy contento con el campeonato que he hecho. Aún puedo quedarme más contento con este último partido. De todas formas, duele que se juzgue toda la trayectoria del torneo por un solo partido.
Con su victoria, pueden meter a Pablo y Albisu en la final.
Por la relación personal con Pablo, aparte de ser un gran maestro, sería bonito. Para mí es un gran apoyo dentro y fuera de la pelota y es como si fuera mi hermano, ya lo he dicho muchas veces. Entonces, lógicamente, si su clasificación está en mis manos, saldré a por todas en Donostia.