22 compañías teatrales, 25 representaciones, 48 actrices, 44 actores, 15 directores y 14 directoras son algunas de las cifras que marcan las Jornadas de Teatro de Eibar que van a tener lugar en la villa armera entre el 14 de febrero y 21 de marzo. Otra cifra relevante es la que identifica la edición que se va a celebrar este año. Son ya 47 las ocasiones en las que Eibar ha servido de marco a esta gran fiesta del teatro, que cada año reúne en esta localidad a los actores y compañías más destacadas del panorama vasco y estatal.

2024 no va a ser una excepción y los aficionados volverán a disfrutar de algunos de los mejores montajes de la actualidad, así como de las actuaciones de actores de primer nivel, como Anabel Alonso, Lolita Flores, Carmelo Gómez o Rafael Álvarez 'El Brujo', entre otros. El teatro vasco también contará con una destacada presencia en los encuentros teatrales de Eibar y, entre los actores que van a actuar en la villa armera, se incluyen nombres como los de Joseba Apaolaza, Miren Arrieta, Aitziber Garmendia, Iker Galarza, José Ramón Soroiz, Martxelo Rubio o Aizpea Goenaga.

La presentación del la 47ª edición de las Jornadas de Teatro de Eibar tuvo lugar ayer en el salón de plenos de la villa. La cita contó con la presencia de representantes del Ayuntamiento de Eibar, la Diputación Foral de Gipuzkoa y el Gobierno Vasco. El primero en tomar la palabra fue el alcalde de Eibar, Jon Iraola, quien hizo un breve balance del festival del año pasado y puso en valor el trabajo de personas e instituciones a la hora de hacer posible cada nueva edición de estas Jornadas, un ambicioso proyecto que este año cuenta con un presupuesto de 224.000 euros.

7.000 personas en 2023

El año pasado hubo 7.000 espectadores en las representaciones que tuvieron lugar en el Complejo Educativo de la Uni-Eibar y el Teatro Coliseo, y este año se aspira a reeditar ese éxito con una programación de primer nivel. Iraola aprovechó su intervención para destacar el papel del teatro como espacio de libertad, tomando como punto de partida algunos sucesos que se han producido en los últimos días en Madrid, donde grupos de personas se concentraron a la puertas de un teatro para solicitar la suspensión de la obra Altsasu por su disconformidad con el argumento: “Estamos en un contexto en el que nos encontramos con obras que tienen dificultades para representarse en otros lugares del país. Estamos viendo casos de censura que creíamos olvidados, algo que a lo que estas jornadas son ajenas, ya que Eibar seguirá siendo una oasis para el teatro y la cultura”.

El concejal de Cultura, Andoni Zabala, fue el encargado de ofrecer unas pinceladas generales de una programación que, tal y como se ha señalado anteriormente, contará con la participación de 22 compañías y acogerá un total de 25 representaciones. Siete de las compañías son guipuzconas, otras seis vizcaínas, cuatro madrileñas y una de Cataluña, Galicia, Aragón, Andalucia y Cantabria, respectivamente. El euskera también estará presente sobre las tablas con ocho representaciones, al igual que la música, con el espectáculo ¡Vamos, que nos vamos!, con el que Golden Apple Quartet está anunciando su adiós a los escenarios, y con Gurpil Gainean, de Demode Quartet.

Las Jornadas se inaugurarán el día 14 de febrero, a las 19.00 horas en el Teatro Coliseo, en un acto que contará con la presencia de la directora y actriz Anabel Alonso como ponente y la actriz eibarresa Irene Hernando como presentadora. El coloquio versará sobre la capacidad de adaptación que tiene el teatro bajo el título Resilientes. Al día siguiente, se presentará la obra La Celestina, protagonizada por la propia Anabel Alonso, bajo la dirección de Antonio Castro Guijosa.

El drama La guerra de nuestros antepasados, de Carmelo Gómez y Miguel Hermoso; Nevenka, de la directora María Goiricelaya; la comedia Almacenados, de la directora Begoña Bilbao Lejarzegi, e intepretada por Iker Galarza y Zuhaitz Gurrutxaga; la actriz Lolita Flores, que presentará Poncia; y Rafael Álvarez, El Brujo, que llevará a escena El viaje del monstruo Fiero, son algunas de las obras destacadas.

El resto de las representaciones que se podrán ver serán el espectáculo infantil de títeres Andereño; la danza con Tómbola, a cargo de Saray Garzia, Nadia Yagoubi, y Ada Continente; Días estupendos, dirigida por Itziar Elano con la actuación de Gorka Luna, Izar Pizarro, Itxaso Sánchez, Omar Somai, Markel Vázquez y Sofía Zallio; El jardín de las posibilidades, interpretado por Eva Barón, Lidia Casares, Patricia Cercas, Belén Galarza y Julia Sanchez, al mando de Anabel Díez, y Gurpil Gainean, que lidera Patxi Barco y escenifican Iker Huitzi, Joli Pascualena, Santi Romano, y Karlos Nguema.

Las Jornadas también ofrecerán la posibilidad de presenciar el drama Del color de la leche, de Fernando Bernués, con un elenco integrado por Joseba Apaolaza, Miren Arrieta, Mireia Gabilondo, Aitziber Garmendia, Jon Olivares y Jose Ramón Soroiz; Edipo, dirigida por Carlos Martín e interpretada por el propio Martín, Félix Martín, Irene Alquezar, Chavi Bruna, Francisco Fraguas, Alba Gallego y Gonzalo Alonso; Mira hadi, una combinación de teatro y canciones de Getari Etxegarai con María Urcelay y Lide Hernando (cantante de Liher); la comedia de Gorka Mínguez Bihar arte soilik; el espectáculo de clown N’importe quoi; el teatro documental Proyecto Helen Keller, y la tragicomedia La sed del minotauro, dirigida por Alex Gereiaga y con los actores y actrices Jon Ander Urresti, Ainhoa Artetxe, Leire Ucha, Arrate Etxeberria.

Adiós de Golden Apple Quartet

Al témino de la presentación se escenificó un adelanto del montaje musical ¡Vamos, que nos vamos! por parte de dos de los miembros de Golden Apple Quartet, Loyola Garmendia y Eduardo Errondosoro. Tirando del humor que les caracteriza, anunciaron que su decisión de retirarse no tiene vuelta atrás, poniendo fin, de este modo, a cuatro décadas de canciones y comedia sobre el escenario. Como no podía ser de otra manera, cerraron su intervención cantando una breve composición a capella, para disfrute de los asistentes a la rueda de prensa, que premiaron su actuación con una cálida ovación.