La técnica del reconocido artista conceptual Ibon Aranberri es “de todo menos pintura”, ha señalado el autor en la presentación en el Museo Reina Sofía de la exposición antológica Vista parcial, para la que ha resignificado y adaptado al espacio expositivo tres décadas de carrera sobre todo escultórica.

Obras tan emblemáticas de Aranberri (Itziar-Deba, 1969) como Política hidráulica, Luz de Lemoniz o Gramática de meseta están entre las más de 40 piezas en formatos como la fotografía, la escultura o el vídeo que constituyen la muestra que podrá verse desde mañana al 11 de marzo.

Ibon Aranberri EFE

Las diez salas del Reina Sofía que forman esta “exposición de exposiciones”, como él mismo la define, sirven para conocer la obra de un artista que comenzó su carrera en la “exploración introspectiva” del estudio para después abandonarlo y entrar en una “dimensión natural y monumental”.

Exposición de Ibon Aranberri en el Reina Sofía EFE

Recorrido

La exposición comienza con una sala en la que se contraponen una serie de pantallas con grabaciones efectuadas en los años 90 en las que se observan repoblaciones forestales en la Cordillera Cantábrica y una enorme tarima que fue un suelo utilizado en la exposición individual de Aranberri en la Kunsthalle de Basilea en 2007.

Sigue con Luz de Lemóniz (2000), un proyecto de maquetas, fotografías y dispositivas sobre la construcción inconclusa de la central nuclear y la narración de la compleja lucha política que se generó a su alrededor en los años 70, según explican desde el Reina Sofía.

Exposición de Ibon Aranberri en el Reina Sofía EFE

Presas y embalses

Por su parte, la obra, que forma parte de los fondos del Reina Sofía, Política hidráulica es una instalación de decenas de fotografías de presas y embalses tomadas entre 2004 y 2010. Se encuentran enmarcadas y apoyadas unas sobre otras contra una esquina de la sala.

En Exercises on the North Side (Ejercicios en el lado norte, 2007), se propuso producir una película de cine de montaña, y expone, además de sus grabaciones, los elementos del mundo del alpinismo que utilizó y los materiales fotográficos.

Otra de sus obras expuestas es Modelos y constructos (2014), en la que deconstruye una estatua partiendo de su propia ausencia. Los restos del proceso, así como la idea de vacío, dan cabida a nuevas lecturas y experiencias estéticas de este artista experimentador, que también utiliza materiales y objetos antiguos como pedazos de iglesias derruidas o calcos de tumbas. Así se va a poder ver desde ya en el Reina Sofía, y se podrá compartir la próxima primavera en el Artium de Gasteiz.