El pasado lunes, el Departamento de Cultura de la Diputación puso en circulación 8.700 bonos de cultura que serán distribuidos en un total de 64 establecimientos del territorio que se han sumado a esta exitosa iniciativa.
Después del bono extraordinario que el ente foral puso en marcha en verano para reactivar la economía cultural tras el confinamiento, esta misma semana ha llegado el ordinario. Se trata de una iniciativa con la que la administración bonifica parte del coste de un producto cultural -libros, música y películas- para fomentar el consumo. Existen dos tipos de bonos, ambos con precio de 20 euros. En el caso de querer comprar productos en euskera, la bonificación será de 12 euros, por lo tanto, el valor será de 32. En el caso del vale para productos en otros idiomas, la bonificación es de ocho euros.
La puesta en circulación de los bonos cultura se ha retrasado con respecto a otros años debido a una petición expresa del Gremio de Libreros del territorio, que no quería que estos vales se solapasen con los que ofrecía el Bono Comercio emitido por el Gobierno Vasco y que concluía por estas fechas.
Con la cercanía de festividades navideñas, librerías como Tobacco Days y Zubieta en Donostia o Garoa en Zarautz, entre otras, han comenzado ya a vender estos bonos. No obstante, la diferencia principal con respecto a otras ocasiones es que la Diputación ha decidido, como novedad, que este año la validez del bono se prolongue hasta el mes de abril para hacerla coincidir con la campaña del Día del Libro.
El diputado de Cultura, Harkaitz Millán, ha enfatizado el esfuerzo que ha hecho su departamento al hacer dos convocatorias de esta iniciativa, precisamente, en un momento en el que el sector cultural se ve en la cuerda floja debido al COVID-19 y a las restricciones. "Ha costado pero, finalmente, vamos a poder ofrecer un segundo en este año tan complicado". En este sentido, ha recordado que para las dos tiradas han destinado el doble del presupuesto de 2019 y, en total, se han emitido tres veces más bonos culturales que el año pasado -para estos casi 9.000 tiques ha destinado 80.000 euros-.
A su vez, el representante público ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que compre en comercios de proximidad y destine el bono a obras de autores locales "como forma de ayudar al sector y a los creadores".
Los bonos
Los 8.700 bonos se han repartido en 64 establecimientos de todo el territorio que se han adherido a la iniciativa y han sido distribuidos, según explica el Departamento de Cultura en un comunicado, "en función al equilibrio territorial y comarcal, y el peso específico de cada establecimiento" -los comercios contarán con un distintivo que permitirá a los clientes reconocer dónde pueden hacerse con uno de estos vales-. En cuanto al número total de comercios que se han inscrito en la iniciativa, las fuentes forales explicaron que la campaña ha contado con un nivel de adhesión similar a pasadas convocatorias.
Del total de bonos, 2.700 se destinan para productos culturales en euskera y los 6.000 restantes para la adquisición de cultura en otros idiomas. En este sentido, cuando se haga una compra superior a 20 euros en cine, música o literatura en euskera se aplicará una bonificación de hasta doce euros. En el caso de cultura en otros idiomas, la bonificación será de ocho. En cualquier caso, la iniciativa excluye la compra de libros de texto, estudios o profesionales.
Por otra parte, la adquisición de este bono no implica necesariamente su aplicación en compras al mismo momento -puede intercambiarse más adelante-. Eso sí, solo será válido, recuerda la Diputación, en el mismo establecimiento en el que se solicitó.
